Durante siglos, muchas tribus de Orcos y Goblins han luchado y ocupado Peñasco Negro, y la más poderosa de esas tribus siempre ha considerado Peñasco su hogar. En la actualidad, la más poderosa de todas estas tribus es la tribu Kolmillos Rojos.
Descripción[]
No está claro de donde le vienen el nombre. Algunos dicen que dicen que la tribu recibió su nombre de la espada Kolmillo Rojo, la espada mágica que solo puede ser enarbolada por el Kaudillo de la tribu, aunque hay otros que aseguran que fue a la inversa.
El actual Kaudillo de la tribu es Gorfang Rotgut. Bajo su liderazgo, los Kolmilloz Rojoz subyugaron bajo su poder a la mayoría de las tribus orcas de la zona, y establecieron una inestable alianza con los Goblins Nocturnos de la tribu Luna Torzida, controlada Skarsnik. Mientras Gorfang controla el extremo occidental del Paso de la Muerte, Skarsnik se queda con el oriental.
Los Enanos han sufrido mucho a manos de los Kolmilloz Rojoz, siendo su crimen más infame cuando asaltaron Karak-Azul y secuestraron a muchos de los parientes del Rey Kazador. Kazador ha ofrecido una gran recompensa a quien rescate a sus familiares (o al menos recuperase sus cadáveres), y la posibilidad de elegir personalmente los mejores tesoros a cualquiera que matara a Gorfang.
Conflicto de Canon[]
Esta información apareció en la Guía del Coleccionista: Orcos y Goblins, y entra en conflicto con el trasfondo de los libros de ejercito.
Al contrario que la mayoría de las tribus de Orcos y Goblins que pueblan las Tierras Yermas, los Kolmillo Rojo no tienen un territorio propio, sino que viajan a través de las mesetas bajas de las Tierras del Sur siguiendo a los grandes jabalíes que componen el grueso de sus ejércitos. Cada Orco joven debe dar caza, capturar y adiestrar a su propia montura porcina. Sólo cuando lo logra, se le permite pintar uno de sus colmillos de color rojo y formar parte de la tribu.
A pesar de su vida nómada, que ha atraído a muchos Orcos Zalvajes bajo su estandarte, cada año regresan a la meseta al pie de Karak-Ocho-Picos para beber, luchar y planear las incursiones del año próximo.


