Se cree que esta extraña enfermedad se originó en las calurosas junglas de Lustria, y que fue llevada al Viejo Mundo en el siglo XV. Parece propagarse únicamente mediante el contacto de portadores de plaga. Cuando una víctima contrae la putrefacción ocular, experimenta dolorosas jaquecas al tiempo que sus ojos se llenan de fluidos, haciendo que se hinchen y convulsionen en sus cuencas. Conforme los ojos se van llenando de líquido, la visión de la víctima se vuelve borrosa y distorsionada. Muchos de los afectados se perforan los ojos con cuchillos para aliviar el dolor, lo que esparce los fluidos enfermos en todas direcciones. Si la víctima padece esta enfermedad durante cuatro días o más sus ojos reventarán, con lo que queda ciego para siempre. Curiosamente, los ojos parecen esperar a que haya alguien cerca para estallar. Es por ello que en tiempos pasados había tantas sacerdotisas de Shallya ciegas.
Fuente[]
- Warhammer Fantasy JdR: Tomo de Corrupción (2ª Ed. Rol)