
El Preyton es una bestia infame: de forma asquerosa e incandescente de rabia. Es una criaturas salvajes y odiosa que acechan las boscosas tierras de Bretonia, especialmente en el Bosque de Arden, cuyas profundidades están llenas de mutantes, Hombres Bestia con cabeza de ciervo y cosas mucho peores.
Los Preytones son feroces e implacables, destruyendo todo lo que les rodea, recordando a los garragors. Pero a diferencia de esos jabalíes infernales, los Preytones pueden llegar a matar por deporte. Son tan conocidos por su ferocidad que el avistamiento de uno atraerá a caballeros a lo largo de muchos kilómetros a la redonda, pues buscan demostrar su valor matando a la bestia.
Descripción[]
Los Preytons son poderosas y aladas criaturas del caos, siendo monstruosidades híbridas como las Quimeras. Sobre sus cabezas vagamente equinas hay un par de grandes astas afiladas y ennegrecidas, lo que ha causado que los caballeros más temerarios los confundan erróneamente con los majestuosos Reyes de los Ciervos. Estas bestias son poseedoras de una astucia oscura, y atraerán a tales caballeros a las profundidades del bosque antes de revelar sus ojos rojos como la sangre y sus múltiples hileras de colmillos dentados cuando se abalanzan para destrozar y despedazar a sus presas.

Son criaturas retorcidas, con su pellejo desgarrado y mutilado, con tiras de pelaje colgando o habiéndose desprendido para ser reemplazado por plumas o escamas irregulares. Las patas delanteras y el cuerpo parecidos a los de un oscuro ciervo parcialmente retorcido y malformado, y los cuartos traseros terminan en patas y garras leónidas. Lucen unas monstruosas alas deshilachadas como las de una gran rapaz, pero rara vez vuelan por encima del dosel del bosque, prefiriendo acechar bajo los árboles.
Si bien su apariencia es realmente nauseabunda, es la legendaria crueldad de los Preytons lo que los hace realmente peligrosos. Cuerpos destrozados más allá del reconocimiento y tramos de bosques ensuciados y pisoteados traicionan la presencia de uno de esos seres. Cualquier cosa lo suficientemente necia como para entrar en estas áreas será cazada y asesinada, y a menudo los Preytons simplemente descartarán el cadáver desgarrado y lo abandonaran para que se pudra, habiéndolo matado motivados por el puro odio en lugar de por el hambre.
Una oscura leyenda dice que este terrible odio nació hace mucho tiempo. Varios miembros del culto de Taal creen que los preytones no son criaturas naturales ni han nacido directamente del Caos. Sostienen que los monstruos se crean en viles rituales de los Chamanes de los Hombres Bestia a partir del cadáver de un Rey de los Ciervos frente a una Piedra de la Manada cubierta de sacrificios. Su existencia está, por lo tanto, plagada de intenso dolor y de recuerdos dispersos que insinúan constantemente lo que una vez fueron, impulsándolos en su locura destructiva. Hay tribus enteras de Hombres Bestia que los consideran sagrados, adorándolos desde lejos.
Desprovistos de su naturaleza noble, actualmente los Preytones solo conocen un odio que abarca todo lo que han perdido, llevándolos a despedazar y matar llenos de una terrible malicia. Ignorarán los fuertes golpes de un caballero para destrozar a un campesino caído de una manera indecible y espantosa. Los Preytones odian toda la vida, tanto la suya como cualquier otra, con un odio tan puro que es una locura. Incluso cuando son heridos, sienten una retorcida satisfacción, dándose cuenta de manera instintiva de que solo en la muerte terminará su tormento.
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Imágenes[]
Curiosidades[]
- El Preyton está basado en el "peritio" descrito por Jorge Luis Borges en su obra El libro de los seres imaginarios.
Fuentes[]
- Warhammer Forge: Monstrous Arcanum, pág. 77.
- Warhammer Fantasy JdR: El Zoo Imperial (4ª Ed. Rol), págs. 60-61.