
Uno de los mayores honores que se le puede conceder a un skaven del Clan Pestilens es el derecho a blandir el incensario de plaga. Esta terrible arma es en esencia un mangual, pero en lugar de una bola sólida, al final de la cadena tiene un incensario. Los Sacerdote de Plaga llenan el incensario con piedra de disformidad y materiales infectados con enfermedades. El portador del incensario prende el contenido y se lanza al combate, blandiendo su herramienta maldita con un salvaje abandono, extendiendo la tragedia y el sufrimiento a todo lo que golpea. Sin embargo, el honor de llevar esta arma es una sentencia de muerte, ya que el portador del incensario siempre acaba expuesto a la mayor parte de las emanaciones.
Fuente[]
- Warhammer Fantasy JdR: Hijos de la Rata Cornuda (2ª Ed. Rol), págs. 101-102.