Wiki La Biblioteca del Viejo Mundo
Advertisement
Wiki La Biblioteca del Viejo Mundo

Necrofagos cripta

Los necrófagos infestan cualquier lugar en el que se pueda tener acceso a cadáveres, principalmente criptas y cementerios, aunque también pueden vivir en las alcantarillas de una gran urbe o lo más profundo de un bosque. Viven en una sociedad tribal en la que se protegen los unos a los otros y comparten el alimento. El líder es normalmente el guerrero más poderoso, y es conocido como el Roehuesos.

Descripcion

Los Necrófagos de la Cripta son criaturas feas y encorvadas a las que solo les queda un vestigio de racionalidad. Su piel es oscura y sucia, sus ojos bestiales y dementes, y sus labios torcidos en un mohín revelan unos dientes muy afilados en sus bocas babeantes. Suelen vestir con andrajos que han arrancado a sus víctimas y llevan armas saqueadas o moldeadas toscamente con los restos de sus desagradables comidas.

De todas formas, los Necrófagos de la Cripta no necesitan estas herramientas para matar, ya que sus largas garras les bastan para cumplir sus necesidades. Estas armas naturales tienen incrustadas la suciedad y la carne putrefacta, y hasta el más ligero arañazo de las garras de un Necrófago hace que su víctima muera por la infección de sus heridas. Además, su dieta a base de carne putrefacta, les confiere una resistencia y vigor formidables.

Necrófagos por Mark Gibbons

A

unque no están verdaderamente muertos, los Necrófagos de la Cripta sienten inconscientemente la Magia Oscura que rodea a los señores No Muertos más poderosos y se ven atraídos inexorablemente hacia ellos. Cuando su presencia se hace patente, su recién encontrado maestro domina rápidamente sus ávidas y débiles mentes. Aunque corren a la batalla en pos de su maestro, los Necrófagos de la Cripta e incluso sus líderes Roehuesos, son criaturas cobardes que se escabullen del combate si su presa los contraataca con auténtica determinación. Esta cobardía innata puede vencerse mediante una orden mental de sus maestros vampíricos, obligando a los Necrófagos que han huido a regresar a primera línea gracias a la Magia Oscura.

Los necrófagos de la cripta tienden a seguir a los ejércitos de No-Muertos para darse un festín en el campo de batalla una vez que el enemigo haya sido derrotado. Estos merodeadores curiosos son captados por el poder de un comandante no muerto y son arrastrados para que se unan al resto de necrófagos, y porque algo en su sangre les impulsa a hacerlo: es la maldición del Gran Nigromante.

Algunas veces, un Roehuesos especialmente ambicioso consigue unir a varias tribus de necrófagos bajo su mando y lanzarlos contra un asentamiento humano alejado o un puesto fronterizo con la promesa de comida y gloria. Si tiene éxito, los necrófagos se envalentonarán y tratan de ir a más, y otras manadas se unirán bajo el liderazgo de tan excepcional Roehuesos, que pasará a llamarse a sí mismo Rey.

Necrofagos 5ª

Los primeros Necrófagos fueron los descendientes de los enajenados y diabólicos caníbales del Lejano Sur, hombres que comían la carne de los muertos en sangrientos rituales. Los come-cadáveres primitivos vivían a orillas del Mar Agrio, pues se habían visto atraídos bajo la sombra gélida e imponente de Nagashizzar. Las tribus primitivas rendían culto al Gran Nigromante y, con frecuencia, participaron del Festín Oscuro. Mientras las grandes hogueras ardían para captar la atención de su dios oscuro, los más viejos de la tribu prepararían sacrificios para matanzas rituales en los que morían criminales y cautivos de otras tribus cuando era posible, o los miembros de familias menos favorecidas cuando no quedaba más remedio. Las tribus se atiborraban de la carne de los suyos y, generación tras generación volvían a hacerlo, hasta que acabaron enloqueciendo a causa de estas prácticas abominables. En la actualidad, estos humanoides degenerados vagan por la Desolación de Nagash, alimentándose de los viajeros a los que atacan en su búsqueda de carne fresca.

Incluso en la época de iluminación del Emperador Karl Franz, se conocen historias de canibalismo dentro de las fronteras del Imperio. Durante los tiempos de hambruna y pestilencia, los más desesperados y depravados se dieron un festín de carne humana para poder sobrevivir. Al parecer, granjas aisladas e incluso aldeas enteras han involucionado hasta este vil estado. En algunas de ellas, esta práctica se ha convertido en consuetudinaria a pesar de no ser necesaria. Ciertas aldeas endogámicas de Sylvania se han quemado hasta los cimientos por tropas del Emperador debido a esta repugnante desgracia.

Necrófago Condes Vampiro por zhangji

Un ejemplo de esto lo tenemos en en el año 2512, con autenticas Hordas de Necrófagos de la Cripta. Cuando las cosechas volvieron a arruinarse por tercer año consecutivo, las Órdenes de Caballería de Stirland fueron asignadas en masa a “investigar” las fronteras de su reino yermo. La batalla a gran escala entre las brillantes tropas del Conde Elector y las hordas voraces de los afligidos aldeanos todavía no se ha olvidado. Sus campos y pobres aldeas fueron arrasados hasta los cimientos, pero el recuerdo de su repugnancia aún perdura.

Al verse literalmente perseguidos hasta el subsuelo por sus perseguidores, estos caníbales y su progenie mutante se ocultan en catacumbas y mausoleos. Allí, los Necrófagos de la Cripta devoran los cadáveres de los nobles o se alimentan de los cadáveres de los campesinos en los cementerios de los pobres.

Los Sacerdotes de Morr hacen lo que pueden para proteger sus jardines sagrados de los ataques de los Necrófagos de la Cripta, pero muchos de los cementerios y camposantos del Viejo Mundo datan de hace mil años o más y bajo ellos hay laberintos de cámaras y túneles subterráneos, ya que durante innumerables generaciones se han excavado tumbas nuevas y mayores para los muertos y se han erigido mausoleos aún más grandes.

En ocasiones, la Hermandad de Morr emplea a cazadores de brujas profesionales para limpiar las catacumbas con espada y fuego. Pero, cuando pasa un tiempo, los Necrófagos de la Cripta regresan para comerse a los muertos y atacar a los dolientes y sacerdotes. Sin embargo, otras colonias de Necrófagos permanecen ocultas durante muchos años. Al parecer, un ejército pequeño de estas repugnantes y piojosas criaturas habita en el interior de las criptas que hay en las colinas alrededor de Mousillon, y ataca a esta ciudad maldita cada vez que hay luna llena del Caos. Incluso en épocas de relativa paz, la guardia de la ciudad está siempre bien armada y nunca entra en los mausoleos y sepulcros de los cementerios de Mousillon sino es en grupos de, al menos una docena de hombres.

Artículos de interés

Yaghur

Miniaturas

Imágenes

Fuentes

  • Ejércitos Warhammer: Condes Vampiro (6ª edición).
  • Ejércitos Warhammer: Condes Vampiro (7ª edición).
  • Ejércitos Warhammer: Condes Vampiro (8ª edición).
Advertisement