"Ya no tengo el derecho de rezar a Sigmar el Puro, sino a los Demonios que custodian el Portal que conduce al Reino del Caos. Os suplico vuestra compasión. Descansad ahora, dormid toda la eternidad. Ya sois libre de las tenebrosas nubes de la guerra."
- —Conde Mordrek el Condenado, a un Caballero de la Reiksgard moribundo.
El Conde Mordrek no lidera ningun ejercito, y cuando participa en una gran batalla, cabalga solo, ya que nunca se une a ningún regimiento, siempre lucha en solitario.
Mordrek no porta ninguna Marca del Caos; a qué dios servirá y el porqué los Dioses del Caos le abandonaron son misterios sin respuesta.
Historia[]
¿Existirá alguien que recuerde cómo llegó el Conde Mordrek el Condenado a su terrible destino? ¿Habrá alguien entre los sabios del Viejo Mundo que recuerde a qué siniestro Dios sirvió? Si existe tal hombre, guarda celosamente sus conocimientos.
Se cree que los Dioses recompensaron al Conde Mordrek con el regalo de la Condenación Eterna. Mordrek recorre el mundo a merced de la voluntad de los Dioses del Caos, sin morir jamás, pero tampoco ascendiendo nunca al Reino del Caos. Ha muerto en muchas ocasiones y cada vez ha resucitado para volver a servir a los Dioses del Caos. Ha tenido que sufrir la experiencia de muchas muertes, y ha sobrevivido durante muchas generaciones.
La maldición que padece el Conde Mordrek es sufrir cambios continuamente, así como vivir eternamente. En el interior de su Armadura del Caos su cuerpo se retuerce de dolor por las constantes mutaciones que sufre. Sólo los Dioses del Caos saben por qué han determinado este cruel destino para su sirviente, y sus razones no son algo que los mortales puedan comprender.
Él mata en nombre de los Dioses Oscuros, con la vana esperanza de que un día pueda liberarse de su maldición y alcanzar el pacífico descanso de la muerte. Envidia a aquellos que mueren bajo su espada o son convertidos en Engendros, puesto que ellos gozan del olvido que él ansía.
La Fortaleza de Mordrek[]
El Conde Mordrek posee su propia fortaleza en los Desiertos del Caos, que por alguna razón se ha vuelto tan resistente como su amo. Si la fortaleza es derribada, simplemente volverá a crecer, lista para enfrentar el próximo asalto. En algún momento, los Skavens lanzaron un asalto a la fortaleza por razones desconocidas y desde entonces han estado atrapados en un asedio sin fin. Se desconoce si Mordrek está al tanto del ataque que los hombres rata han lanzado contra su fortaleza.
El Fin de los Tiempos[]
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El trasfondo de esta sección o artículo se basa en la campaña de El Fin de los Tiempos, que ha sustituido la línea argumental de La Tormenta del Caos.
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"Nunca tuve una oportunidad..."
- —Últimas palabras de Mordrek el Condenado
Durante los eventos del Fin de los Tiempos se reveló que Mordrek fue una vez el Señor del Torreón de Latón, un Conde Elector e hijo de un Emperador hace muchísimos años. Participó en el sitio de Middenheim, donde luchó contra Valten, el Elegido de Sigmar. Después de un duelo breve pero brutal, el Conde Mordrek el Condenado fue abatido y finalmente cayó por última vez. Sus últimas palabras traicionaron un suspiro de alivio, el final definitivo de su largo y duro viaje.
Objetos Mágicos[]
Curiosidades[]
- En dos ocasiones distintas antes de la Caída de Middenheim en 2527 CI, los Dioses del Caos desafiaron a Wulfrik el Errante a cazar y derrotar a Mordrek el Condenado. Lo hizo y logró matarlo en ambas ocasiones, aunque el Señor del Caos obviamente renació después de esas derrotas.
Fuentes[]
- Suplemento: Paladines del Caos (5ª Edición), págs. 20-21.
- Novela: El Señor del Fin de los Tiempos, por Josh Reynolds.