"Puede que los Elfos no descubriéramos el Blood Bowl, pero desde luego somos los mejores jugándolo..."
- —Príncipe Moranion, Dragones de Caledor
El Príncipe Moranion, un noble Elfo de alta cuna y sangre ancestral, fue llamado por el destino para gobernar a su pueblo. Sin embargo, al poco tiempo el joven príncipe (500 años más o menos, lo cual es joven para un elfo) desarrolló la afición por el Blood Bowl. En aquellos tiempos se consideraba poco apropiado para un Alto Elfo de su estatus mostrar interés por un "pasatiempo" tan tosco como aquel, y desde luego el asunto causó revuelo en la corte. Pero Moranion, que era un joven rebelde, se negó a dejar de lado aquella pasión y, ante el horror de sus progenitores, inspiró a una banda de camaradas a formar su propio equipo, seguro de que su resplandeciente armadura y su actitud desdeñosa les llevaría al éxito.
La visión de la flor y nata de las juventudes de los Altos Elfos en uniformes de Blood Bowl horrorizó tanto a sus familias que tuvieron que tomar cartas en el asunto. Las madres y padres de los nobles jugadores les amenazaron con desheredaros si diputaban aunque fuese un solo partido, a menos que el rival tuviese un estatus social igual o superior a ellos, una demanda a la que los Príncipes Dragón (que era el nombre con el que los jóvenes habían bautizo a su equipo) accedieron a regañadientes. Aquel fue un engaño astuto por parte de sus padres, que sabían que no existía nobles de nivel semejante dispuestos a rebajarse a jugar aquel deporte, y de ese modo los Príncipes Dragón se desbandaron casi en el mismo momento de su fundación.
Aunque Moranion se había quedado solo en su rebelión, seguía decidido a jugar a Blood Bowl, de modo que acabó fichado por los Dragones de Caledor (de hecho compró el equipo)... y para la sorpresa de los hinchas y el desconsuelo de sus nobles padres demostró ser un jugador de mucho talento, que ha llevado a los Dragones de Caledor a numerosas victorias memorables.
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Imágenes[]
Fuente[]
- Death Zone - Temporada Uno.