
Imagen ilustrativa
La vampiresa Kattarin, fue una miembro del clan Lahmia que logró hacerse con el trono del reino Kislev y gobernar la nación durante más de siglo y medio (2309-2465 CI), sobre la que impuso un sangriento yugo. Por esta razón es conocida y referenciada en los libros de historia como la zarina vampira o principalmente como Kattarin la Sangrienta.
Historia[]
Incluso antes de ser convertida al vampirismo, Kattarin ya poseía una gran ambición y crueldad. Recibió el Beso de Sangre por parte del vampiro renegado Chandagnac, uno de los pocos Lahmia varones y conocido principalmente por ser el padre vampírico de la famosa Genevieve Dieudonné. Existe cierta ironía en todo esto ya que Melissa d’Acques, su progenitora en la no muerte, le concedió el don del vampirismo sin el permiso de Neferata, ella misma le desaconsejó que transformara a Kattarin.
Como Lahmia, Kattarin fue educada en los secretos, conocimientos y poderes de su clan vampírico. Sin embargo, fue una de las vampiresas que se revelaron contra el orden establecido del mismo. Especialmente mostraba disconformidad con la política y planes de la propia Neferata de manipular a los mortales entre bastidores para, cuando lo estimase oportuno, mostrarse ante ellos y dirigirlos para recuperar el antiguo reino de Lahmia y restaurar la Secta de la Sangre. Kattarin formaba parte del grupo que prefería amasar poder y gobernar a los humanos en aquel entonces que esperar a un supuesto momento adecuado que se mostraba lejano e indefinido.
Para ello, Katarin acabó con la vida de su mortal esposo, el cual era considerado un cabeza hueca, para convertirse en zarina absoluta de Kislev, aprovechándose de dos facetas de la sociedad Kislevita. La primera es que los kislevitas no están muy familiarizados con la faceta seductora y manipuladora de los vampiros, acostumbrados a verlos como bestias monstruosas y salvajes. La segunda es que es tradición desde hace mucho que las brujas que dominan el Saber del Hielo ocupen cargos de gran importancia en Kislev, incluso la posición de regente del reino, así que no era nada insólito que una pálida y hermosa mujer dotada de habilidades mágicas subiese al trono.
Kattarin todavía estaría en el trono si no fuera porque sus propios descendientes y los boyardos comprendieron que, al tener una soberana inmortal, nadie más podría llegar a la cumbre del poder, por lo que debían conformarse con disputarse parte de él. Por ello, conspiraron para derrocarla, formando una alianza liderada por el Zarevich Pavel, hijo de uno de los tataranietos de la zarina. El propio zarevich Pavel acabó con su vida, ensartándola como a una mariposa, y poniendo así fin a su sanguinario reinado.
Su cadáver permanece hasta nuestros días conservado en un bloque de hielo, y expuesto en el Palacio de la capital, como una terrible advertencia a los demás Vampiros. Igualmente, Neferata también convirtió su derrocamiento y muerte en un símbolo del peligro que entraña mostrar públicamente los poderes vampíricos antes de que el mundo estuviera preparado para arrodillarse ante el clan Lahmia.
Fuentes[]
- Warhammer Fantasy JdR: Los Amos de la Noche (2ª Ed. Rol), págs. 12, 52.
- Warhammer Fantasy JdR: Realm of the Ice Queen (2ª Ed. Rol), pág. 18.
- Saga Genevieve la Vampira: Drachenfels por Jack Yeovil.
- Tercer Acto, capítulo 1.
- Cuarto Acto, capítulo 1.
- Saga Genevieve la Vampira: Uñas de Plata, por Jack Yeovil.
- El factor Ibby el Pez:
- Capitulo 1.
- Capitulo 2.
- Capitulo 8.
- El factor Ibby el Pez: