Deambulando por la naturaleza, principalmente al norte y al este de Altdorf, Gregor Martak parece cada centímetro del típico Hechicero Ámbar. Su cabello es largo y despeinado, su barba desordenada, sus uñas afiladas y su piel de un marrón rojizo testimonio de una vida expuesta a los elementos. Vestido con pelajes y pieles de animales, empuña un bastón de madera rematado con el cráneo de un águila, su animal tótem.
Historia[]
Al crecer en los campos de Middenland, Martak siempre se sintió atraído por los lugares salvajes y, aunque tiene poco tiempo para la gente de los pueblos y aldeas que bordea en sus viajes, está lo suficientemente feliz de conocer a otros vagabundos y a aquellos que sobreviven en las zonas salvajes. Aunque tiene reputación de ser conciso e introvertido, Martak puede ser alegre y parlanchín cuando está en su elemento, y posee una risa sincera y estrepitosa.
Martak está dotado, o maldecido, con vívidas premoniciones del futuro. Deambula por los márgenes del Imperio deseoso de noticias y conocimientos sobre el estado de la nación. Martak se mantiene al tanto de los asuntos de estado y las maquinaciones políticas dentro del Imperio. Esto no se debe a ningún interés particular por la política o el poder, sino porque siente la obligación de conocer a su enemigo.
Martak tiene aún menos interés en la política de su Hermandad, pero intuye con creciente certeza que tarde o temprano será nombrado Patriarca. Siente este llamado al poder y la responsabilidad que asumirá, incluso cuando su instinto es huir de él lo más rápido que pueda.
Gregor es acosado por pesadillas y visiones. Aquí es donde ve su ascenso a la prominencia y, sospecha, su propia muerte. Pero peor aún, en estas visiones ve la destrucción del Imperio. Martak ve una variedad de terribles ataques contra el Imperio, provenientes de muchas fuentes diferentes. Aunque siente que muchos de estos eventos ocurrirán a cierta distancia en el futuro, está desarrollando una red de aliados que pueden viajar por el Imperio, visitar los sitios de estas posibles incursiones, investigarlas e informarle. Por supuesto, si el peligro es inminente, esperará que se defiendan allí mismo.
El Fin de los Tiempos[]
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El trasfondo de esta sección o artículo se basa en la campaña de El Fin de los Tiempos, que ha sustituido la línea argumental de La Tormenta del Caos.
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Gregor Martak era el Patriarca de la Orden de Ámbar cuando se desató la invasión del Caos de Archaón sobre el Viejo Mundo. Fue él quien puso fin a las dudas sobre la existencia de la bestia conocida como Malagor al avistarlo con sus propios ojos.
A finales de 2524 CI y principio de 2525 CI, durante la defensa del Bastión Áurico que contenía a los ejércitos del Caos, Balthasar Gelt fue declarado traidor por ser revelada su práctica de la nigromancia, fue Gregor Martak el elegido como nuevo Patriarca Supremo de los Colegios de la Magia del Imperio.
Batallas del Fin de los Tiempos[]
Dioses y Monstruos[]
Después de presenciar la dura decisión de Kurt Helborg en nombre de Karl Franz, el Patriarca Supremo se propuso encontrar al único hombre que podría obligar al Imperio a unirse de nuevo. Después de entrar en comunión con los pájaros y las bestias del Drakwald, se dispuso a encontrar al Emperador con la ayuda de un viejo aliado - el anciano grifo de dos cabezas conocido como Chillido Gemelo.
La Batalla por Middenheim[]
Gregor Martak había luchado durante largo tiempo y duramente en defensa del Imperio. Años de pérdidas y dificultades habían deteriorado su espíritu. Sin embargo ahora el trémulo último poder de un dios fluía por sus venas. Martak ardía con un fuego frío, con sus pensamientos resonando con el aullido desafiante de los lobos del invierno. Sólo sabía que lucharía hasta el último aliento en defensa de Middenheim y haría que el enemigo pagara en sangre la ruina que habían traído al Imperio.
Vídeos[]
Fuentes[]
- The End Times IV - Thanquol.
- The End Times II - Glottkin.
- Warhammer Fantasy JdR: Winds of Magic (4ª Ed. Rol), pág. 144.