Wiki La Biblioteca del Viejo Mundo
Advertisement
Wiki La Biblioteca del Viejo Mundo
Gran hechicero

"Déjame con mis estudios. Tengo asuntos mucho más importantes que tratar. ¡El destino del Imperio puede estar en juego!"

Gran Hechicero anónimo

Dentro del Imperio, los señores de las órdenes de la magia son Grandes Hechiceros, individuos muy poderosos que ya no perciben el mundo como las demás personas, pues han dedicado sus vidas a la magia, ahora personifican en palabras, obra y forma física el saber que han escogido. Cuando un Elfo alcanza este nivel de destreza mágica, se considera que ya ha completado su aprendizaje mágico menor, y ya esta listo para partir hacia las torres de Hoeth para convertirse en un archimago.

Hechos poco conocidos[]

Aquellos que practican la magia por cualquier período de tiempo descubren que lenta pero inevitablemente comienza a alterar su percepción de la realidad. Puede comenzar con cosas simples, como colores cada vez más vívidos o escuchar voces susurradas en el viento, pero con el tiempo llevará a un cambio fundamental en la mente del magister.

En el momento en que un mago alcanza el rango de Gran Hechicero, está irrevocablemente infundido con la magia, la esencia se filtra en la médula misma de sus huesos y en los rincones más oscuros de su psique. Tal percepción alterada puede dar lugar a un comportamiento inusual y, como saben todos los que tratan con estos poderosos magos, sus gestos son más que meras excentricidades. Un Gran Hechicero a menudo mira a la distancia, murmura entre dientes o hace extraños gestos con las manos como si estuviera en constante diálogo con una fuerza invisible, una consecuencia de mirar constantemente hacia el más allá.

A veces es difícil para un Gran Hechicero concentrarse en el presente, ya que su mente vagabundea en el tiempo o se distrae con el colorido flujo de la magia que acaricia el objeto en el que debería concentrarse. Por supuesto, en momentos de urgencia, un mago puede salir de su ensoñación, y la fuente de su distracción se convierte en la herramienta con la que forja su gran poder.

La llamada a la guerra[]

Cuando el poder de un hechicero alcanza su punto máximo y logra los rangos más altos dentro de los Colegios de la Magia, también asume el deber sagrado de usar su poder para proteger al Imperio en tiempos de conflicto. Los miembros de los Colegios de la Magia entienden que fueron creados y pueden prosperar para proteger al Imperio de aquellos que lo destruirían. Por ello, en tiempos de guerra, el Emperador llama a sus magos más poderosos a marchar a la batalla junto a sus ejércitos y usar sus dones para derrotar a sus enemigos. Es un deber que los Grandes Hechiceros aceptan como parte del precio de su poder y uno que la mayoría realiza voluntariamente.

Por supuesto, este deber para el Emperador puede venir en muchas formas, y si bien el servicio más común es en tiempos de guerra, a veces puede manifestarse en deberes más sutiles. Puede esperarse que los Grandes Hechiceros que no son reacios a la guerra paguen un diezmo en pociones o artefactos mágicos al Emperador para ayudar a sus fuerzas en la batalla, o podrían acordar entrenar a algunos de sus aprendices como hechiceros de Batalla, magos específicamente entrenados para devastar a los enemigos del Emperador con poderes destructivos.

Grandes Hechiceros destacados[]

Fuentes[]

Advertisement