
Gran Condesa de Wissenland, Condesa de Nuln, Duquesa de Meissen
Emmanuelle von Liebwitz es la actual Condesa Electora de la provincia de Wissenland, siendo la única mujer entre los actuales Condes Electores del Imperio, teniendo su corte en la ciudad-estado de Nuln.
Conocida como la solterona más codiciada del Imperio, se la considera la mujer más hermosa de la nación, famosa por sus fiestas escandalosas, su estilo de vestir extravagante y sus numerosos romances, aunque también se la considera una mujer frívola, caprichosa y poco interesada en los asuntos de gobierno.
Descripción[]
La Gran Condesa Emmanuelle von Liebewitz, ampliamente conocida como ‘la Condesa’, es amiga de la infancia del Emperador, y se rumorea que usó dicha relación para garantizar su propio ascenso al poder. Conocida por sus escandalosas fiestas, opulentos bailes y su moda vanguardista, tiene fama de ser la mujer más poderosa y de moda del Imperio, así como la más bella y elegible. Se rumoreaba que la condesa estaba tan envanecida con su belleza, que se había hecho construir una residencia de verano sólo con espejos, y que insistía en que sus sirvientas fuesen siempre enmascaradas con el fin de que ella brillase aún más por comparación.

Los susurros acerca de su salvaje temperamento, su caprichosa naturaleza y su desdén por la política la persiguen a cada paso que da, susurros a menudo compartidos por quienes están celosos de su indiscutible control sobre Nuln. Personas de todos los rangos la imitan para ganarse su favor o simplemente ser como ella, lo que significa que sus opciones de vestimenta, incluso siendo extravagantes, se copian en todas partes; se imita su acento refinado y suavemente hablado con una suave elevación; y su gran amor por la música, la cultura y el entretenimiento extravagante marca la pauta en Nuln.
Es la soltera más deseable del Imperio, y es una verdad universalmente reconocida que cualquier caballero soltero en posesión de una buena fortuna debe desearla, aunque también es conocida por tener muchos romances, lo que ha dado lugar a muchos comentarios, chismorreos y chistes a su costa. Corren muchas historias sobre las numerosas aventuras amorosas de la condesa Emmanuelle y sus extrañas preferencias en la alcoba. Se dice que para la condesa Emmanuelle von Liebewitz, permanecer fiel a un verdadero amor significaba no irse a la cama con más de diez hombres a la vez. Este tipo de comentarios nunca se mencionan cerca donde sus guardias y protectores puedan oírlos, pues no son pocos los que han acabado en el cementerio por ello.
Se suele afirmar que tiene mal genio y que es políticamente ingenua. La mayoría considera que es poco competente en su posición. Dice el refrán, “la cabeza de la Condesa está tan vacía como su manifiesto”. Parece estar más preocupada de los lujos de su estado que con las minucias de gobernar no solo una provincia (que la mayoría consideraba un remanso), sino también una importante ciudad. Detesta a los burgueses y plebeyos de Wissenland, y rara vez se ocupa de los pueblos y ciudades bajo su competencia. Sin embargo, quienes la conocen descartan esos rumores por considerarlos ilusiones de quienes envidian su posición. Emmanuelle es una jugadora política cuidadosa e inteligente, pero no exenta de caprichos, como atestiguarían algunos de sus cómplices, si aún vivieran.

Estandarte personal de Emmanuelle
Emmanuelle se ha enfrentado a horrores y evitó el desastre por los pelos durante los Grandes Disturbios de la Niebla de Altdorf, una cadena de sucesos que destruyeron una parte de Nuln hace ocho años, y que aquellos que no estaban demasiado ciegos para verlo consideraban obra de los Skavens. Emmanuelle emergió de las secuelas como una gobernante más fuerte, pero con un punto de crueldad cuando se trata de buscar su propia protección.
Emmanuelle no es una soldado o general, ni siquiera una combatiente, pero suele tener a su disposición guardias y protectores capaces, tanto como para protegerla a ella como para salvaguardar la ciudad de Nuln. Entre alguno de estos se encuentra el temido Theodore Bruckner, que sirve a la Condesa como verdugo, protector de Nuln y campeón judicial personal. También estaba el hermano menor de Emmanuelle, el vizconde Leos von Liebwitz, fallecido en circunstancias poco claras. Se le consideraba uno de los maestros de la espada más letales del Imperio, pues había participado en varios duelos para defender el honor de su hermana mayor contra los calumniadores de su persona.
Hoy día, en su edad madura, conserva su belleza juvenil y muchos señores claman por su mano, con la esperanza de ganar algo de su considerable poder. No ha nombrado un heredero oficial, lo que alimenta los rumores de que tiene por lo menos un hijo secreto (bien) escondido.
Armamento[]
- Salpicasangre - Como Condesa Electora de Wissenland, tiene derecho a portar el Colmillo Rúnico de la provincia, siendo una de las espadas de guerra mágicas que los Enanos le regalaron al Imperio hace mucho tiempo, pero rara vez la usa fuera de las ocasiones oficiales, prefiriendo mantenerla guardada en el arsenal real.
Historia[]
Pasado[]
Emmanuelle von Liebwitz era la hija primogénita del anterior Conde Elector de Wissenland, Konstantin von Liebwitz. Desde que era una niña pequeña, ella soñaba con ser la belleza más grande del Imperio, y su madre nunca dejó de alentarla y colmarla con todos los caprichos que pudo. Emmanuelle no estuvo contenta cuando nació su hermana pequeña, pues quería ser la mujer más hermosa de todas y su hermana era una rival indeseada. Su padre protestó, pero su madre, ya convertida a la causa de su hija mayor como la belleza más grandiosa del Imperio, se mostró insistente.
Tanto Emmanuelle y como su madre quería que la segunda hija fuera criada como un niño, bajo el nombre de Leos von Liebwitz, para que la belleza de Emmanuelle no tuviera rival. El padre de ambas sabía que lo que querían su esposa y su hija no era correcto, pero siempre había sido esclavo de las mujeres. Al final, cedió, pues siempre había deseado un hijo varón. Konstantin dejó la educación de sus hijos en manos de su esposa mientras él se concentraba en sus estudios. Leos fue castigada y golpeada para que aprendiera a comportarse como un niño, mientras que Emmanuelle era recompensada. Si ella cometía una trasgresión, lo castigaban a <<él>>.
Cuando Emmanuelle tenía diecisiete años y Leos ocho, la madre murió en un accidente de carruaje. Por entonces, Leos ya era un niño como debía. Poco después de la muerte de su gato mimado, Emmanuelle dejó de golpear a su “hermano”. Ahora era su madre y podía enviarlo fuera de casa o castigarlo a voluntad. Utilizaba su poder sobre él muy de vez en cuando, pues recordaba lo que ella misma había creado en su hermano. Leos se había vuelto muy devoto de su hermana. Si alguna vez se peleaba con los chicos de la ciudad, se descubría que el oponente lo había hecho enfadar al insultar a su hermana. Y siempre que peleaba, Leos ganaba. Emmanuelle se volvió bastante protectora con Leos, y le hizo de madre mucho mejor que su madre real.
Emmanuelle von Liebwitz fue amiga desde la infancia de Karl Franz, y consiguió su asiento como electora al mismo tiempo que él fue coronado Emperador, y se rumorea que ha utilizado esta relación para asegurarse su propio ascenso al poder. Ella demandaba el título de Conde Elector, pero no era la única. Congraciándose servilmente con Franz –algunos sugieren que seduciéndole- asumió el título de Condesa Electora de Wissenland en el 2503. Emmanuelle demostró que no tener cabeza para el gobierno, estando más preocupada de los lujos de su estado que con las minucias de gobernar no solo una provincia (que la mayoría consideraba un remanso), sino también una importante ciudad como Nuln.
La representación de Drachenfels[]
Para el 2505, la Condesa Emmanuelle fue invitada, junto a los restantes electores y miembros preeminentes de la sociedad Imperial, a viajar al Castillo Drachenfels. Fuera invitada por Oswald von Königswald, que con motivo de su inminente elección como Conde Elector de la provincia de Ostland ante la inminente muerte su padre Maximilian, había decidió organizar una gran obra de teatro dirigida por Detlef Sierck donde se representaría su gran victoria sobre Constant Drachenfels.
Emmanuelle viajó al castillo en la gran comitiva imperial junto con Oswald, el Emperador Karl Franz, y buena parte de los Condes Electores. Durante el viaje, la condesa no se ganó muchos amigos con sus gimoteos acerca de los tediosos detalles de los centenares de bailes de máscaras y fiestas que había dado. El Emperador se sintió a la vez divertido y espantado cuando vio que la condesa arrullaba a su hijo Luitpold de una manera que no era nada material, sino porque consideraba al futuro Emperador como una buena perspectiva matrimonial a pesar de la diferencia de edades y temperamentos existente entre ambos.
En la cena posterior a la llegada al castillo, la condesa Emmanuelle se esforzó por eclipsar con su brillo a todos los presentes llevando un vestido con una cola de seis metros — que llevaba bordado el árbol genealógico de la familia imperial en el que se entretejían ramas de los von Liebewitz—, un collar de trescientos zafiros idénticos y un escotado corpiño de paño de oro. La actriz Lilli Nissen, la estrella principal de la grandiosa obra de teatro que se daría lugar en el castillo, intentó igualar a la condesa, no en opulencia pero si en erotismo. Los vestidos de ambas mujeres estaban igualados en mal gusto e incomodidad. La condesa y la actriz se besaron en la mejilla sin tocarse la piel con los labios y se elogiaron mutuamente la apariencia juvenil con veneno chorreando en cada silaba.
Obra de teatro transcurrió sin problemas, hasta que llegó al acto final. En el el actor que interpretaba a Constant Drachenfels se había transformado en el propio Constat Drachenfels, desatando el pánico en el lugar. Karl-Franz estuvo a punto de intervenir pero fue retenido a punta de cuchillo por el propios Oswald von Königswald, quien en realidad se había confabulado con el Gran Hechicero para asesinar al Emperador y poner a todo El Imperio de rodillas.
El público estaba dividido entre la representación del escenario y el drama que se desarrollaba en el palco imperial. La mayoría estaban de pie, y la condesa Emmanuelle sufrió un desmayo. Por fortuna, la conspiración de Oswald y Drachenfels pudo ser detenida gracias a Detlef Sierck con la ayuda de la vampiresa Genevieve, que dieron muerte a ambos, salvando al Imperio.
La amenaza de la Bestia[]
Tras el incidente en el Castillo Drachenfels, Emmanuelle von Liebwitz y sus séquito permaneció el siguiente año en Altdorf, residiendo en el propio palacio Imperial, acudiendo a bailes y festejos organizados por otros nobles así como organizar también ella algunos. En la ciudad de Nuln, ella era la más notable anfitriona del Imperio y, durante su estancia en Altdorf, estaba intentando igualar las cosas por el sistema de ser la huésped más costosa de la capital. Corría el rumor de que la condesa siempre asistía a estas galas escoltada por su hermano Leos, pero que él regresaba solo y dejaba a su hermana en brazos de la «armadura del momento».
Lo que si es cierto, es que durante su estancia en la capital, mantuvo una secreta aunque apasionada relación con Mikael Hasselstein, lector del Culto de Sigmar y confesor del propio Emperador. Al principio disfrutaron de sus encuentros amorosos, pero poco a poco su relación se fue deteriorando. Pese amarla, Mikael consideró que aquello influía negativamente en su trabajo, causando tensión entre ellos, y que Emmanuelle pensara cada vez más en dar por finaliza su relación y buscarse a otro.
En otro orden de cosas, durante ese año se produjeron una violenta serie de asesinatos en la zona de los muelles, en la que las víctimas, todas mujeres, fueron brutalmente mutiladas. Tal era el grado de ensañamiento que muchos atribuían aquellos horribles asesinaros a una bestia, y así es como se denominó al misterioso asesino en serie. Pronto empezaron a surgir multitud de rumores y chismes sobre el origen o la identidad de La Bestia, uno de los cuales era que el asesino era un miembro de la nobleza. Estas habladurías que fueron empleadas por el movimiento social conocido como el Movimiento Revolucionario, que abogaba por el alzamiento de las clases humildes contra los poderes establecidos y el derrocamiento de la nobleza, y aprovecharon los crímenes para incentivar el descontento entre las clases populares.
Todo esto desembocaría en los Grandes Disturbios de la Niebla, una serie una serie de violentos levantamientos populares alentados por los Revolucionarios. Desencadenando numerosos enfrentamientos con a guardia y que se terminara prendiendo fuego a varios edificios. La misma noche en la que se produjo la rebelión, la condesa Emmanuelle acudió junto a otros nobles y dignatarios, y escoltada por su hermano Leos, a un evento organizado en la Casa del Fénix por el embajador de Bretonia Etienne Edouard Villechalze, Conde De la Rougierre. El evento, que consistía en la danza erótica de una bailarina, le resultó de lo más decepcionante y aburrido, y el aburrimiento la enojaba, y tampoco ayudaba que entre los invitados también estuviera Mikael, que trataba de solucionar la situación entre ellos, le resultaba de los más tedioso y lo ignoraba.
En esos momentos, un grupo de revolucionarios asaltó violentamente la posada, encabezados por Yevgeny Yefimovich, uno de los principales líderes del Movimiento Revolucionario. Mientras Leos trataba de contener a la turba, Yefimovich se lanzó directamente contra la Condesa. Emmanuelle se alzó la falda y echó a correr, mientras el revolucionario la perseguía hendiendo el aire con dagas, y consiguió acorralarla. Aterrada, Emmanuelle les rezó a todos los dioses y pidió ser perdonada. Cuando el agitador entró en la oscuridad donde estaba ella, pudo ver que sus rasgos no eran del todo naturales. Algo relumbraba bajo la piel y hacía que su cara pareciese más una máscara luminosa.
Al verla en peligro, Hasselstein cogió una silla y estrelló contra Yefimovich, haciéndose pedazos. El lector se encontró con una pata en la mano y aporreó con ella la cabeza del agitador. Emmanuelle gritaba a pleno pulmón. Alzó las manos para defenderse, aferrando la cara de Yefimovich. Para su sorpresa de los demás presentes, la cara se desprendió, revelando que en realidad Yefimovich era un mutante. Al descubrirse la oscura verdad, Yefimovich huyó, y al extenderse la noticia, los sublevados perdieron el ímpetu y las revueltas fueron sofocadas.
Tras este incidente, Emmanuelle regresó al palacio junto a su hermano Leos. Estaba decidida a regresar a Nuln lo antes posible, y permanecerían allí hasta que se hubiese olvidado aquel atemorizador asunto. Había permanecido demasiado tiempo en esta ciudad, alejada de sus responsabilidades sociales y políticas para estar cerca del corazón del Imperio. Mikael la había retenido más tiempo del que ella había planeado. Al principio, el apasionado sacerdote, cuyo deseo de poder era tan urgente como su deseo de ella, había constituido una conquista interesante. Sin embargo, estaba convirtiéndose en un tedio, o incluso peor, ya que Mikael estaba mostrándose demasiado ardiente. Podía resultar impredeciblemente problemático si no lo abandonaba con algo de tacto.
Una vez en sus aposentos en el Palacio, De la Rougierre y Mikael Hasselstein fueron a verla para tratar de hablar con ella, pero la Condesa ordenó a su hermano que los echara, pues no estaba de humor. Tanto el Enano como el sacerdote quisieron protestar, pero conocían de sobras la destreza de Leos como espadachín, así que al final cedieron y se marcharon. En cuanto, quedaron a solas, su hermano Leos sufrió una “transformación”.
Resultó que Leos von Liebwitz era el temido asesino conocido como la Bestia. Debido a los abusos y castigos que sufrió de niña para aprender a comportarse como un hombre, Leos acabó desarrollando una segunda personalidad, una personalidad homicida que despreciaba a las mujeres. Leos trataba de controlar estos impulsos, pero en ocasiones la personalidad de la Bestia terminaba por surgir, y acababa apareciendo una nueva víctima. En esos momento, tras tratar de contenerse todo lo posible, la Bestia se impuso definitivamente.
Por fortuna, en esos momentos, entraron en la habitación el barón Johann von Mecklenberg, el guardia Harald Kleindeinst, y la vidente Rosanna Ophuls, quienes llevaban un tiempo tras la pista de La Bestia. Se sorprendieron al ver a Leos vestido con uno de los trajes de su hermana, viendo que era una persona realmente hermosa, más que la propia Emmanuelle. En su locura, Leos les aracó, pero fue abatido por Harald con un diestro lanzamiento de su Cuchillo Arrojadizo Magnin. Para descubrir la verdad, Rosanna usó sus poderes en el agonizante Leos, y descubrió que había sido una niña, pero por culpa de los egoístas caprichos de su hermana mayor, fue obligada a comportarse como un hombre, desarrollando una doble personalidad, que batallaban constantemente por la mente de Leos hasta que finalmente La Bestia salió triunfante. Al descubrir la tragedia de Leos, Rosanna no pudo evitar escupir a Emmanuelle en la cara con desprecio.
Todo aquel asunto quedó encubierto. Oficialmente, Leos murió en un duelo de honor contra Harald, y se le echó la responsabilidad de sus crímenes a Yevgeny Yefimovich, del que se descubrió que era un cultista de Tzeentch que quería aprovechar el movimiento popular para debilitar al Imperio. La condesa Emmanuelle von Liebewitz regresó a Nuln con sus cortesanos y su conciencia, y su hermana fue enterrada en el panteón familiar con una inscripción que la aludía como «amado hijo y hermano». Tenía intenciones de presentar una petición para que procesaran a Harald, pero Johann intercedió, hablando con Karl-Franz para que la petición fuera rechazada, y amenazó a la condesa electora con hacer pública la verdad si insistía con ello.
Invasión Skaven[]
Desde hacía un tiempo, los hombres rata habían planeado apoderarse de la ciudad de Nuln, y en las cloacas empezaban a formar un gran ejercito. El líder de esta fuerza conquistadora era el Vidente Gris Thanquol, y para lograr su objetivo, logró manipular a Fritz von Halstadt, magistrado Jefe de Nuln y jefe de la policía secreta de la Condesa Emmanuelle.
Durante meses, el Vidente Gris Thanquol había suministrado información a Von Halstadt, mucha de ella falsa para manejarlo como una marioneta y terminara desencadenando un terrible incidente diplomático. Para ello le diría que el propio cuñado del Emperador, que en esos momentos era huésped de Emmanuelle, era secretamente un mutante y, peor aún, el último amante de la condesa. En cuanto lo capturada y torturada, desembocaría en una guerra entre Nuln y las fuerzas de Karl Franz que debilitaría de forma fatal a ambos bandos y despejaría despejado el camino para la invasión Skaven en el mundo de la superficie.
Por fortuna, la conspiración fue descubierta por un par de aventureros, Félix Jaeger y Gotrek Gurnisson. Se infiltraron en la mansión del magistrado y dieron muerte a Fritz von Halstadt, prendiendo fuego a sus archivos que contenían una gran cantidad de información confidencial. La relación de von Halstadt con los Skavens no fue descubierta por las investigaciones, y se consideró que fuera asesinado por uno los Skavens al descubrir un complot de estos. Sería sucedido en el cargo de jefe de la policía secreta por Hieronymus Ostwald.
Thanquol estaba furioso por la muerte de un peón tan útil para desestabilizar el Imperio, aun así los Skavens prosiguieron con sus planes de conquista de Nuln. Durante los siguientes meses ocurrieron una serie de graves incidentes: la Facultad de Ingeniería terminó ardiendo, una desconocida enfermedad se estaba extendiendo por la ciudad, y surgió una nueva variedad de ratas para que atacaba y devoraba las reservas de alimento de Nuln.
Todo esto generó gran malestar en la población y empezaran a producirse altercados entre los desesperados habitantes. Algunos habían decidido abandonar la ciudad, y la ley y el orden ya habían dejado de existir en algunas zonas intramuros. Emmanuelle se vio obligada a contratar mercenarios, ofreciéndoles doble paga a quienes la ayudaran a mantener la paz a modo de refuerzos de su guardia personal y de la tristemente diezmada guardia de la ciudad. Aún así, en medio de esta crisis, la Condesa Electora decidió organizar un baile de máscaras en un fútil intento de distraer a su corte de los problemas que tenían.
Aquello suponía una gran oportunidad para Thanquol. Si lograba tomar el palacio con todos los nobles humanos dentro, el ejército humano de Nuln quedaría decapitado y sería presa fácil del ataque skaven. Debido a una serie de circunstancia, la invasión de los Hombres Rata se produjo antes de los previsto, pero el Vidente Gris siguió con su plan y se infiltró en el palacio junto a un escuadrón de guerreros, entrando triunfante en el salón de baile y capturando a todos los presentes.
Thanquol miró a la atemorizada multitud y la recorrió con los ojos para ver si podía hallar a la Condesa Electora, pero debido a los disfraces, no pudo hacerlo, así que fue interrogando uno a uno por la condesa Emmanuelle, matándolos en el acto cuando no le daban la respuesta que buscaba. Tras seis victimas, la Condesa Electora Emmanuelle declaró con tono desafiante su presencia, para evitar más muertes.
A cambio de perdonarle la vida, el Vidente Gris exigió a la Condesa que ordenará a sus soldados que se rindieran de inmediato y sin oponer resistencia. Para su sorpresa, la Condesa se negó en rotundo a doblegarse a sus exigencias. Iracundo, Thanquol amenazó con matarla cruelmente si no obedecía, pero la Emmanuelle se mantuvo firme, negándose a rendir la ciudad a los Skavens a pesar del miedo que sentía.
Por fortuna la ciudad de Nuln y la propia Condesa Electora, el Vidente Gris Thanquol no tuvo tiempo de cumplir sus amenazas, pues en ese momento una turba de ciudadanos y soldados de la ciudad llegaron hasta el salón de baile, con Gotrek y Félix a la cabeza. Thanquol y sus guerreros trataron de hacer frente a esta nueva amenaza, pero el Vidente Gris comprendió que todo estaba perdido y usó su magia para escapar, dejando a ssu guerreros a su suerte.
Una vez con la condesa a salvo, y con todos los Skavens del palacio muertos, la mayor parte de los guerreros regresaron a la ciudad para acabar con el descabezado ejercito de los Hombres Rata. Se necesitó toda la noche y la mayor parte del día siguiente para eliminar a todos los enemigos de la ciudad, Se habían necesitado muchos días para eliminar la presencia Skavens de las cloacas, aunque no estaban seguro de que estuviesen completamente libres de ellos. También se iniciaron los procesos de reconstrucción de la ciudad, pues muchas calles habían resultado gravemente dañadas durante los combates.
La condesa Emmanuelle se mostró agradecida con Gotrek y Félix por salvar Nuln, aunque no había mucho que pudiese hacer para recompensar a dos delincuentes buscados por las autoridades de Altdorf sin ponerse en contra al propio Emperador. Hubo muchas frases de gratitud y dulces sonrisas, pero poco más.
Asuntos familiares[]
A principios del año 2512, su sobrina, la grafina Maria-Ulrike von Liebwitz de Ambosstein, fue acusada de asesinato. El barón Otto von Dammenblatz, un noble menor del Ducado de Dunkelberg, murió en una de las grandes fiestas de su tía que se celebraron durante el famoso festival de la Semana de la Pólvora de Nuln, siendo encontrado ahogado en una ponchera. Todos en la fiesta de la grafina creen que el barón se quedó inconsciente a base de beber, cayó desmayado sobre la ponchera y se ahogó, pero su hijo. Eberhardt von Dammenblatz de Wissenberg, acusó a la grafina de causar la muerte de su padre por envenenamiento o brujería.
El caso normalmente se habría de celebrar en Nuln, donde tuvo lugar la fiesta en cuestión, pero el barón von Dammenblatz hizo una petición (que fue atendida) para trasladar el juicio a un emplazamiento neutral: después de todo, Nuln estaba bajo la jurisdicción de la gran Condesa Emmanuelle, quien también era parte en el proceso. Después de algunas disputas legales, se acordó que el juicio tendría lugar en la ciudad libre de Kemperbad. Por su parte, la grafina Maria-Ulrike hizo una petición (que también fue atendida) para que se le concediera el antiguo derecho de juicio por combate, frustrando a von Dammenblatz, que esperaba influir sobre el jurado con relatos licenciosos y chismes sobre lo que sucede en los infames jolgorios de la Condesa Emmanuelle en Nuln.
Tanto los nobles como sus respectivos campeones judiciales llegaron a Kemperbad, y los preparativos para el juicio se pusieron en marcha. Para frustración del barón von Dammenblatz, el guerrero de Maria-Ulrike salió victorioso, por lo que la grafina salió impune de todos los cargos que la acusaban. Alegremente, dejó Kemperbad por Nuln para darle a su tía la buena noticia. La Condesa también fuera citada en la acusación de Dammenblatz y, aunque su rango la hizo inmune al enjuiciamiento por la denuncia de un noble menor, la noticia fue tan bienvenida para ella como para la grafina.
Para celebrar su victoria en el juicio, la grafina Maria-Ulrike fue invitada a la ópera por su ilustre tía a la ópera: se estrenaba una nueva producción de la tragedia clásica Otenno en el Teatro Staatsoper, con un libreto revisado del reconocido dramaturgo Detlef Sierck. Desafortunadamente para ellas, el derrotado barón Eberhardt von Dammenblatz tenía sed de venganza. Sus agentes planearon hacer estallar el Palco Ducal durante la actuación, matando a la grafina Maria-Ulrike y a la Condesa Emmanuelle, a quien el barón culpaba igualmente por la muerte de su padre.
Por fortuna para Emmanuelle, el atentado no llegó a producirse.
La Agitación[]
A lo largo del año 2512, El Imperio se vio al borde de la crisis, amenazando con fragmentarse y desatar una nueva guerra civil debido al incremento de enemistades y hostilidades entre las provincias y casas nobles, y Wissenland no fue una expeción. Desde hacía varios meses, se había producido un aumento de las tensiones entre la Condesa Emmanuelle y los Toppenheimer, la familia gobernante de Sudenland. Tras la restauración de la autoridad imperial después de la retirada final de Gorbad, había muchos en Sudenland que consideraban que las propiedades concedidas a los nobles de Wissenland se extendían por tierras que deberían pertenecer legítimamente a una Solland restaurada.
La electora Etelka Toppenheimer, actual electora de Sudenland, era su más firme defensora. También se ha atrevido a declarar que, si se saliera con la suya, los Toppenheimer gobernarían Nuln como lo hicieron en siglos anteriores. Emmanuelle von Liebwitz anhelaba librarse de los Toppenheimer para estuvo favoreció abiertamente a los Pfiefraucher, los principales rivales de los Toppenheimer en Sudenland. Recientemente, Etelka había prometido imprudentemente su corona a su hijo adoptivo, Basil, dejando a sus doce hijos naturales consternados y rebelde, y Emmanuelle esperaba aprovecharse del hecho.
Emmanuelle deseaba conquistar Sudenland, y estaba trabajando duro para difundir rumores incendiarios e información comprometedora para ayudar a acelerar el proceso. Ella es una gobernante fuerte y querida, en contraste con la Gran condesa de Sudenland, más pusilánime. La principal obsesión de Emmanuelle era obtener una licencia para anexionarse la provincia vecina. Su respetada consejera Elspeth von Draken ya le había informado de algunos siniestros sucesos en Pfeildorf, pero carecía de pruebas concluyentes que justifiquen una acción militar.
Antes la crisis que vivía el Imperio, se decidió organizar una reunión de los electores en el Volkshalle para tratar de buscar una solución a los diversos problemas que acuciaban la nación. Allí se dio cuenta a primera vista de que el Emperador no era Karl-Franz, si no un doble. El verdadero Karl Franz había caído gravemente enfermo y se recurrió a su doble, Hermann von Feilbach, para que presidiera la reunión. Los objetivos de Emmanuelle eran mantener a Etelka Toppenheimer sin aliados. Buscaba una apertura que le proporcionase una excusa para anexionar Sudenland, bloqueando cualquier resolución que reafirmase la sucesión de Sudenland. Utilizó el conocimiento del engaño de ‘Karl-Franz’ para asegurarse esto, aunque nunca reveló el secreto, por respeto a la posición de Maria-Luise.
La reunión de electores acabó de la peor manera posible cuando ‘Karl-Franz’ y el Graf Boris se enzarzaron en una discusión que terminó de mala manera, que terminó con la destrucción del Ghal Maraz, dando lugar a La Agitación, un conjunto de conflictos menores que amenazaban con destruir la unidad del Imperio. Durante estos eventos, la Gran condesa Emmanuelle von Liebwitz afirmó que la Gran baronesa Etelka Toppenheimer de Sudenland había conspirado contra los intereses de Nuln, por lo que aprovechó para anexionarse su provincia. Para sorpresa de muchos, la Gran condesa Emmanuelle fue apoyada en sus esfuerzos bélicos por nada menos que ocho de los propios hijos de la Gran baronesa Toppenheimer.
Afortunadamente, la crisis de la Agitación llegó a su fin cuando Ghal Maraz regresó, y el Emperador Karl-Franz, recuperado de su enfermedad y con un propósito renovado, se dispuso a restablecer sus alianzas de mayor confianza, reorganizando los territorios políticos del Imperio. Emmanuelle von Liebwitz era una de esas alianzas. Y como al finalizar la Agitación estaba firmemente en posesión de Sudenland, se le permitió anexionarla a la provincia de Wissenland.
Tormenta del Caos[]
El trasfondo que puedes leer en esta sección o artículo se basa en la campaña mundial de La Tormenta del Caos, que ha sido sustituida por la de El Fin de los Tiempos.
|
Emmanuelle von Liebwitz, que aún conserva su belleza en la madurez, adora Nuln y pasa casi todo el tiempo en ella, celebrando grandes fiestas y banquetes que duran días. Apenas oculta su desdén por los "molestos" burgueses y plebeyos de Wissenland, y el total aburrimiento que la tortura cada vez que tiene que ocuparse de asuntos provinciales, por lo que rara vez se ocupa de los pueblos y ciudades bajo su competencia, entregando más y más poder a la familia Toppenheimer de Pfeildorf.
Tras los acontecimientos de la Tormenta del Caos, para librarse de la monótona provincia, la Condesa von Liehwitz está negociando con el Emperador para independizar completamente Nuln de Wissenland. Ella conservaría Nuln y su voto electoral, mientras que la provincia sería cedida a la familia Toppenheimer, que también recibiría un voto electoral. Todo esto se llevaría a cabo a cambio de cuantiosas donaciones a las arcas de guerra del Emperador, algo que él considera prudente, dadas las demandas para reconstruir el norte. Se trata de una estrategia que la Condesa está coordinando con su contrapartida de Talabheim.
Todo su trabajo para separar Nuln de Wissenland se debe a que la Condesa adora la ciudad. Ama la cultura, la pompa, la majestuosidad, su historia y sus grandes arcas. No importa lo desesperada que pueda ser la situación de los plebeyos, ella siempre se ha garantizado comodidad y placer mientras ha estado instalada en su asiento como Condesa de Nuln. En lo que respecta a ella, los Toppenheimers pueden quedarse con sus crueles inviernos y tristes granjas. Todo lo que ella quiere es Nuln. Por tanto gran parte del gobierno de Wissenland recae sobre la Asamblea, un grupo de mercaderes, nobles menores y eclesiásticos de los que ella es la cabeza, aunque rara vez hace apariciones.
El Fin de los Tiempos[]
El trasfondo de esta sección o artículo se basa en la campaña de El Fin de los Tiempos, que ha sustituido la línea argumental de La Tormenta del Caos.
|
Tras la caída del Bastión Áurico, la Condesa Emmanuelle von Liebwitz buscó refugio en Altdorf donde, tras la desaparición de Karl Franz en la frontera norte, exigió una audiencia con el Gran Mariscal Kurt Helborg y se peleó todos los días con los Condes Electores Alberich Haupt-Anderssen de Talabecland y Theoderic Gausser de Nordland por sus propios intereses en ausencia del Emperador.
Posteriormente, regresó a Nuln, donde sus tropas lucharon contra la invasión Skaven liderada nuevamente por el Vidente Gris Thanquol entre finales de 2524 CI y principios de 2525 CI. Sin embargo, eventualmente su amada ciudad cayó ante los hombres rata, y ella lideró el principal grupo de refugiados mientras huían por las puertas del norte de la metrópolis. La Condesa junto a los supervivientes buscaron refugio en la vecina provincia de Averland. Se desconoce su destino final.
Caída[]
En el cuenco de cobre en el que el vidente veía imágenes de lo que ocurría en el mundo, al ver Nuln, pudo ver como la ciudad era arrasada por la violencia generada por multitudes de fanáticos y agoreros, que asaltaron y saquearon las mansiones de los ricos, colgando a estos de sogas. La Condesa von Liebwitz fue arrancada de su tocador y llevada a rastras en medio de una tormenta de acusaciones que abarcaban desde adulterio a brujería.
Familia Conocida[]
- Konstantin von Liebwitz - Padre de Emmanuelle.
- Leos von Liebwitz - Hermano menor, fue uno de los mejores duelistas del Imperio, murió en extrañas circunstancias.
- Maria-Ulrike von Liebwitz de Ambosstein - Sobrina de la condesa, pertenece a la casa Ambosstein.
- Wolfhart von Liebwitz - Primo lejano al que Emmanuelle nombró mariscal.
Conflicto Canon[]
- En alguna de las fuentes más antiguas, Emmanuelle von Liebwitz aparece con el apellido "Liebewitz".
- En el libro de rol "Hijos de la Rata Cornuda" establece que la invasión de Nuln por parte de los Skavens tuvo lugar en el año 2512. estos e contradice con otras fuentes, que establecen que tuvo lugar en 2499, pero esta fecha genera contradicciones con otros eventos. Las diversas fuentes indican que Emmanuelle von Liebwitz ya era la Condesa Electora cuando tuvo lugar el ataque, pero oficialmente no ocupó el cargo hasta 2503. Igualmente, siguiendo la línea temporal de las novelas de Gotrek y Félix, se produjo después de los Disturbios del Impuesto de las Ventanas, sin embargo cronológicamente este ocurrió en el año 2502, tres años después del ataque a Nuln.
Fuentes[]
- Warhammer Fantasy JdR: Herederos de Sigmar (2ª Ed. Rol), págs. 94, 97-98.
- Warhammer Fantasy JdR: Los Senderos de los Malditos III - Forjas de Nuln (2ª Ed. Rol), pág. 9.
- Warhammer Fantasy JdR: Noches Agitadas y Días Difíciles (4ª Ed. Rol), págs. 9, 10, 25-26, 32, 36, 40, 47.
- Warhammer Fantasy JdR: Compendio de El enemigo en las Sombras (4ª Ed. Rol), pág. 13.
- Warhammer Fantasy JdR: Imperio en Ruinas (4ª Ed. Rol), págs. 10, 13, 26, 94, 198-199.
- Libro de ejército: Skavens (7ª edición), págs. 28, 31.
- Warhammer Fantasy JdR: Hijos de la Rata Cornuda (2ª Ed. Rol), pág. 36.
- Saga de Las aventuras de Gotrek y Félix: MataSkavens, por William King.
- Cap. 1: Garra Skaven.
- Cap. 3: Incursión Nocturna.
- Cap. 6: La batalla de Nuln.
- Epílogo.
- Saga Genevieve la Vampira: Drachenfels, por Jack Yeovil.
- Cuarto Acto.
- Capítulo 2.
- Capítulo 4.
- Capítulo 6.
- Quinto Acto.
- Capítulo 2.
- Capítulo 7.
- Epílogo.
- Cuarto Acto.
- Saga Genevieve la Vampira: La Bestia de Altdorf, por Jack Yeovil.
- Primera parte: Asesinato.
- Capítulo 1.
- Segunda parte: Niebla.
- Capítulo 1.
- Capítulo 4.
- Tercera Parte: Duelo.
- Capítulo 1.
- Cuarta Parte: Tumulto.
- Capítulo 4.
- Capítulo 9.
- Capítulo 10.
- Capítulo 12.
- Quinta Parte: Bestialidad.
- Capítulo 2.
- Capítulo 3.
- Capítulo 4.
- Capítulo 5.
- Capítulo 6.
- Capítulo 7.
- Capítulo 8.
- Epílogo.
- Primera parte: Asesinato.
- Saga Lords of the Dead: El Retorno de Nagash, por Josh Reynolds.
- Prólogo.
- The End Times II - Glottkin, pág. 39.
- The End Times IV - Thanquol, págs. 4 y 147.