Ubicado junto al imponente nacimiento del Taalbaston, El Farol Negro es un extenso edificio que recibe incluso menos luz solar que el resto de los Árboles del Sebo. Un enorme y ancestral farol hecho de hierro negro otorga el nombre a la taberna. Hace mucho tiempo, un Magister borracho y algo demente lanzó un hechizo al farol tras una absurda apuesta, ahora arde en su interior una llama perpetua y los clientes pueden ver aún la ennegrecida marca frente a la taberna donde el Magister se auto inmoló.
El Farol Negro es un refugio famoso de matones, estafadores y escoria de todo tipo. Su propietario, un Tileano llamado Lorenzo, hace la vista gorda dentro de su negocio a todo salvo a los peores delitos y gasta una parte de sus ganancias en sobornos para mantener a la Guardia fuera de su local. Sustenta varias "salas de banquetes" donde los miembros más ricos del hampa local pueden llevar a cabo negocios en privado.
El sótano del Farol Negro tiene una puerta secreta que conduce a los laberintos de Las Ratoneras hacia el oeste. Lorenzo almacena todo tipo de contrabando ilegal en este túnel y, por una tarifa considerable, puede convencérsele para que se deshaga de uno o dos cuerpos sin hacer preguntas.