
"Ambicioso y socialmente móvil, eres la argamasa que, con su dura labor, mantiene unida la sociedad urbana."
- —Descripción de la profesión.
"Me temo que tendréis que quitaros las mochilas y dejar las armas de asta en el suelo al entrar en la tienda. El propietario deduce de mi sueldo la cerámica rota."
- —Frida, tendera a tiempo parcial.
Los Ciudadanos cubren la demanda de trabajadores de los pujantes centros de actividad comercial. Llevan a cabo diversos papeles, tanto para los artesanos privados como para los concejos municipales: empleados de banca, oficinistas, buhoneros, posaderos, vendedores de periódicos, mozos de cuadra, peajero, lavanderos y muchas cosas más. Su nivel de salario es variable; algunos pueden regatear en busca de comisiones adicionales, mientras que los empleados públicos, como por ejemplo los faroleros y los cobradores de peaje, tienen un sueldo fijo. Hay pocas oportunidades de promoción, pero quienes son determinados, espabilados y afortunados podrían acabar como propietarios de un negocio.
Los ciudadanos de más éxito son llamados a menudo a formar parte de los consejos locales que supervisan los asuntos públicos, con los burgomaestres (los líderes municipales más importantes) disfrutando a menudo del mismo estatus social que los príncipes mercaderes y los maestres de gremios.
Los ciudadanos forman parte de una creciente clase de habitantes de la ciudad que, a la vez, tienen dinero y tiempo a su disposición Muchos de ellos se toman uno o dos días libres por semana y podrían fácilmente encajar en una vida de aventuras entre turnos o después de la hora del cierre. Algunos incluso querrían salir más al exterior y, si tienen algún dinerillo ahorrado, es tan sencillo como negociar tiempo libre con su patrón. Es muy común que los ciudadanos del Imperio vayan de peregrinación durante semanas o meses. Los trabajadores hábiles van muy buscados y es muy probable que cuando vuelvan encuentren trabajo enseguida.
Fuente[]
- Warhammer Fantasy JdR 4ª Edición, pág. 64.