
Caradryel el Pacificador de la Casa Reveniol de Yvresse, fue el quinto Rey Fénix de los Altos Elfos, sucediendo a Caledor II el Guerrero y reinando del 1 al 604 del quinto reinado del calendario élfico (del -1599 al -997 CI). A su muerte le sucedió Tethlis el Asesino.
Historia[]
Una vez más, los Altos Elfos se encontraron en medio de una guerra sin Rey Fénix. Las flotas del Rey Brujo tomaron la Isla Marchita y gran parte de las Tierras Sombrías. Varias Arcas Negras navegaron hasta las playas para formar el núcleo de una nueva ciudad fortaleza en el puerto de Anlec. Desde allí, los Elfos Oscuros se dirigieron hacia el Sur para asediar la Puerta del Grifo.
Los Altos Elfos se encontraron atrapados en las fauces de una trampa, luchando una guerra en dos frentes contra dos enemigos poderosos. El Cuarto Consejo se reunió en el Templo de Asuryan y eligió a Caradryel de Yvresse, que era tan diferente de Caledor II como la noche lo es del día. Era sosegado y sin pretensiones, un soldado mediocre pero un gobernante hábil. Tomó la dura decisión de abandonar el Viejo Mundo. Enfrentado a la hostilidad implacable de los Enanos, le parecía estúpido mantener ejércitos enormes en ultramar, especialmente con una amenaza más urgente en el corazón del hogar de los Elfos. Dejó a un lado el orgullo, pidió la forja de una nueva Corona del Fénix y ordenó a los ejércitos en las colonias del Viejo Mundo que regresaran a casa. Entre los Elfos más orgullosos se creó un gran alboroto. Parecía un insulto enorme al orgullo élfico que la corona original permaneciese en manos de los Enanos. Caradryel replicó que antes perdería la corona que el reino y continuó con su política. Muchos Elfos volvieron, pero otros, como los de Athel Loren o los Eonir, se negaron a abandonar su patria adoptiva y permanecieron en el Viejo Mundo. El resto regresó a la isla en busca de la protección que otorgaban los ejércitos de Ulthuan.

Reconociendo su propia incompetencia como general, Caradryel apuntó la necesidad de delegar el mando de los ejércitos élficos a una serie de brillantes comandantes. Estos consiguieron muchas victorias en los campos de batalla. Tethlis de Caledor en particular se labró una brillante reputación levantando el asedio de la Puerta del Grifo y obligando a retirarse a los Elfos Oscuros hasta el interior de Anlec.
Con sus guerras en manos de veteranos, Caradryel continuó supervisando la gran retirada del Viejo Mundo. A medida que regresaban más tropas se aumentó el número de fuerzas que protegían las puertas de las fortalezas e implantó un sistema de unidades rotativas que vigilaban esas valiosas ciudadelas, de forma que las fuerzas que las defendían siempre estuviesen frescas y casi al nivel máximo de sus fuerzas.
Durante el resto del reinado de Caradryel, estallaron guerras esporádicas en el norte de Ulthuan. Más y más Elfos Oscuros llegaron procedentes de Naggaroth, empuñando sus espadas después de haber pasado siglos alimentando el odio. Sin embargo toda su malicia retorcida no logró imponerse, pues al llegar se encontraron con los ejércitos disciplinados del Rey Fénix, muchos de los cuales eran veteranos de las guerras contra los Enanos. Los mares del norte fueron el escenario de muchas grandes batallas y a pesar del aumento de la construcción naval, los Altos Elfos nunca fueron capaces del todo de limpiar los mares de sus enemigos. Caradryel fue el primer Rey Fénix en morir pacíficamente en la cama.
Curiosidades[]
- De entre todos los Reyes Fénix, el reinado de Caradryel fue el quinto más largo con 604 años.