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Este artículo contiene información de Total War: Warhammer III
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"El aspecto fétido de los maliciosos caballeros del Señor de la Plaga contradice su ilustre reputación."
- —Anónimo
Cargando con sus enfermizos caballos, los Caballero del Caos de Nurgle acaban con sus enemigos con armas de la plaga e ignoran los golpes recibidos.
Descripción[]
Al igual que los demás acólitos del Dios de la Plaga, las hordas de Caballeros de Nurgle siempre están infectadas con todo tipo de enfermedades deformantes. Una extraña y mórbida energía los impulsa en la batalla, la cual les permite sobrevivir a heridas que, en circunstancias normales, matarían a otros Caballeros del Caos. Sus atuendos, escudos y estandartes, originalmente espléndidos, están siempre hechos trizas y repugnantes, como los harapos de un leproso, y sus antaño opulentas capas de seda o piel les cuelgan de los hombros como el sudario de un cadáver. Los Caballeros de Nurgle muestran sus deformidades abiertamente, orgullosos de sus llagas supurantes y de su piel descolorida, algo muy poco acorde con su prestigioso rango en el campo de batalla.
Armamento[]
- Lanzas - La enfermiza aparición de los caballeros de la Plaga va encabezada por lanzas que brillan con icor y gotas de pus.