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El trasfondo de esta sección o artículo se basa en la campaña de El Fin de los Tiempos, que ha sustituido la línea argumental de La Tormenta del Caos.
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El Heraldo y sus Hombres Bestia arrinconan a Gregor Martak en el Zoo Imperial
El Patriarca Supremo se tambaleó por el largo pasillo que conducía al recinto del zoológico. Todo el lugar se había despertado con su intrusión, sintiendo que algo estaba mal. Los zedonks Arábicos rebuznaban, las tiguanas de Lustria siseaban y los pegasos Bretonianos relinchaban y batían sus alas.
El Patriarca Supremo se arriesgó a mirar hacia atrás y vio figuras con cuernos que se abrían camino hacia la gigante construcción arqueada. Las pezuñas resonaban en la piedra mientras el Heraldo incitaba a su enorme escolta hacia adelante, con cada guerrero bestial sosteniendo un hacha lo suficientemente grande como para decapitar a un grifo. Golpearon hacia Martak, que redobló sus esfuerzos, cojeando tan rápido como podía hacia el otro extremo.
Detrás de él, el Heraldo rió maliciosamente cuando se dio cuenta de que el pasillo de la casa de fieras era un callejón sin salida. Martak tropezó contra la pared del fondo, inclinándose y jadeando sangre.
El Chamán del Rebaño buscó en su túnica para sacar un pequeño vial, que destapó, y dispensó una gota de un maloliente líquido en la lengua.
"¿No hay magia ahora?" se burló el chamán del rebaño, masticando las palabras.
"Por favor... no..." murmuró Martak.
El Heraldo levantó una mano y detuvo a sus compañeros de tribu que portaban hachas, frunciendo el ceño hacia su escasa presa. El chamán del rebaño se puso de pie en toda su altura, con los anudados cuernos aureolados con el poder que bebía de las violentas energías a su alrededor.
"Ah, el hombre-cosa. Tan cerca de la verdadera bestia", gruñó, torciendo la cara en una mueca. "¿Pero que buena es bestia si bestia está enjaulada?"
En respuesta, el pordiosero sangrante que una vez había sido el Patriarca Supremo se limitó a mirar hacia la cueva sombreada a la derecha y dio un bajo silbido repetitivo.
Una ráfaga de fuego al rojo vivo rugió mientras el dragón imperial surgía de la oscuridad, incinerando al chamán del rebaño y a todos los hombres bestia del pasillo con un largo suspiro.
"Buen disparo, mi vieja bestia escamosa", murmuró Martak arrastrando las palabras antes de que la oscuridad lo reclamara.
Contendientes | Duelo de Muerte y Peste | Batalla | Bestia Acorralada | Profecías para Archaón
Fuente[]
- The End Times II - Glottkin