
Este gigantesco cuadrúpedo conocido por los Eslizones como Bastiodón es, tal vez, la mayor bestia blindada de Lustria. Es una fortaleza andante, un bastión vivo cubierto de piel dura como la piedra y una armadura natural de placas de una sustancia parecida al hierro tan densa que puede llegar a frustrar el mordisco de un Carnosaurio. Incluso los golpes que puedan romper las placas exteriores no podrán penetrar profundamente gracias a las capas alternativas de pellejo grueso y escamas adicionales.
Descripción[]
En combate, los Bastiodones intentan pisotear a las criaturas inferiores con sus enormes patas, hundiendo sus cuerpos en el suelo. Aunque su enorme volumen no le permite hacer un impacto atronador como el de un Estegadón, el Bastiodón sigue siendo un combatiente formidable. Su pico de halcón es capaz de partir de un mordisco un árbol bola-bola en dos. Sin embargo, la mejor arma del Bastiodón está al final de su larga y musculosa cola, una bola enorme de hueso cubierto con placas blindadas. Esta protuberancia similar a una maza se puede blandir con una inercia devastadora que puede destrozar granito o pulverizar a los oponentes dejando únicamente cráteres sangrientos que marquen el lugar donde estaban. Incluso las criaturas más grandes respetan esta arma demoledora.
Hay pocos depredadores de Lustria que se atrevan a atacar a un Bastiodón debido a su impenetrable armadura. Sin embargo, esta protección formidable tiene un coste, ya que el Bastiodón es una criatura torpe y pesada, ralentizada por su propio peso. La mayor amenaza para un Bastiodón no viene de los carnívoros gargantuescos sino de las arenas movedizas y el lodo cenagoso que se puede encontrar por toda la jungla. Incluso en tierra firme, las pisadas de la criatura dejan gruesas marcas y si vagabundea demasiado por una zona pantanosa le será fácil quedar atrapada. De esa forma es como los Eslizones atrapan a los Bastiodones, usando su astucia para subyugar y, luego, entrenar a las bestias.
Armamento[]
Cuando van a la guerra, los Bastiodones portan algunas de las armas más atesoradas de las Ciudades-Templo. Su enorme tamaño y sus pellejos blindados les permiten cargar artefactos que otras bestias, incluso los reverenciados Estegadones, rechazan firmemente. Estos objetos reverenciados y sagrados se montan sobre la espalda de la bestia de forma que se puedan activar para castigar a cualquiera que se atreva a poner el pie en el suelo sagrado de Lustria.
Curiosidades[]
- El Bastiodón esta inspirado en los Ankylosaurus.