Antaño, los orgullosos Príncipes de Caledor montaban sobre fieros Dragones con los que arrasaban ejército enteros, pero esos días han pasado. Hoy en día, la mayoría de los dragones duermen en sus guaridas en las Montañas Espinazo del Dragón y en las cuevas bajo la Forja de Vaul, y el enorme esfuerzo que requiere despertarlos no siempre tiene éxito.
Por ello, actualmente los Príncipes Dragón ya no se dirigen a la batalla montados en dragones si no en corceles élficos, pero las tradiciones ancestrales se ven reflejadas en todas las piezas que componen la Armadura de Dragón, una armadura de Ithilmar que lucen los caballeros de Caledor y sus corceles, modelada al estilo antiguo, igual que la que llevaban los jinetes dragón de antaño, todo un recuerdo de aquellos días gloriosos del pasado. Su resistente armadura y sus yelmos con crestas de dragón les protegen del mismo modo que las escamas protegen al dragón; y todo su equipo lleva como blasón un ala, una escama o el fuego de un dragón.
Esta exquisita armadura llena de detalles y adornos se forja en el corazón de un volcán de las Montañas Espinazo del Dragón usando encantamientos antiguos que se perfeccionaron cuando Ulthuan era joven. Forjada y hechizada, la armadura de dragón resiste el calor igual que la antigua armadura de Aenarion. Un príncipe dragón ataviado con su armadura de dragón puede cabalgar a través del fuego, ya sea el aliento de un dragón, la furia alquímica de los Enanos o las llamas de los viles Skavens sin sufrir daño.
Fuentes[]
- Ejércitos Warhammer: Altos Elfos (5ª Edición), pág. 64.
- Ejércitos Warhammer: Altos Elfos (6ª Edición), pág. 15.
- Ejércitos Warhammer: Altos Elfos (7ª Edición), pág. 17.