Guerreros Goblins

Los Goblins varían mucho tanto en tamaño como en hábitos, pero todos ellos pueden considerarse malvados y retorcidos. Físicamente son esqueléticos, desgarbados y con dedos garrudos, lo que les hace perfectos para el hurto y la infiltración. Con sus nerviosos ojos y su comportamiento general de “perro apaleado”, la mayoría de Goblins parecen llevar escrita en la frente la palabra “¡Culpable!” (incluso cuando resulta que eran inocentes). Esto es así porque en realidad se pasan la mayor parte del día cometiendo actos malignos (y el resto del tiempo se lo pasan negando haber sido ellos, o intentando escaquearse de las consecuencias). Debido a esto la vida de un Goblin está plagada de peligros. Su naturaleza avariciosa y su afición por el hurto significan que en las peñas de Goblins las peleas internas son constantes.

Descripción[]

Cobertura forestal por Rick Sardinha Goblins

Para un Goblin, dar la espalda a sus camaradas puede ser fatal, pues las puñaladas a traición están a la orden del día; y si con eso no hubiera suficiente, a los Orcos les gusta patear frecuentemente a los Goblins sólo para demostrar “kién ez máz grande y fuerte”. Los Orcos hambrientos son una amenaza aún peor, pues no le hacen ascos a zamparse a un Goblin cuando tienen un antojo entre comidas. De todos modos los Goblins son ridículamente prolíficos, y por tanto aceptan como algo natural la pérdida de vidas a manos de los Orcos (siempre y cuando el que palme no sea uno mismo sino otro “kamarada”, claro).

Los Goblins se reúnen en grandes masas bajo la tiranía de un líder Orco, o en tribus independientes muy variadas. Tanto si se encuentran sometidos a un Orco dominante, como si son miembros de una tribu independiente, como soldados los Goblins son bastante mediocres, si bien son perfectamente capaces de derrotar a un enemigo gracias a su aplastante superioridad numérica, especialmente si le atacan por el flanco (o aún mejor, por la retaguardia). Entre sus tácticas más populares están lanzarse sobre los enemigos indefensos, y disparar flechas desde una distancia segura.

Los Goblins son los más inteligentes de entre todos los pieles verdes, y también son sus principales constructores, creando desde sus toscas máquinas de guerra hasta las desvencijadas torres de guardia que protegen sus campamentos. En estos casos, los Goblins aportan más el conocimiento y la maña que la fuerza bruta. A lo largo de los años, los Goblins han aprendido a fabricar alas para planear (usando pieles de animales), ruedas de carro, y otros cachivaches igualmente fundamentales para los pieles verdes.