El Anciano de la Asamblea es como se conoce al elector de La Asamblea, siendo uno de los quince electores imperiales, ostentando cierto poder político en el Imperio al tener derecho a voto electoral en la elección del nuevo Emperador. Oficialmente el título es Conde Elector de La Asamblea, pero a los Halflings lo de Conde Elector les suena "demasiado esnob", por lo que prefieren simplemente títulos como Anciano de la Asamblea o Gran Anciano.
Si se enfada lo bastante a un halfling, le recordará a su interlocutor una y otra vez (y otra, y otra...) que el único elector no humano del Imperio es miembro de su raza, y que gozan de tal honor en agradecimiento a todo el bien que han proporcionado. Los humanos, por otro lado, lo achacan simplemente a otro de los extravagantes decretos del Emperador Ludwig.
Descripción[]
Los Halflings ganaron derecho al voto imperial en el año 1010, según cuenta la leyenda, de sus aportaciones a la cocina imperial. El Emperador Ludwig el Gordo ascendió a su cocinero Halfling al rango de Conde Elector tras un fastuoso banquete, dándole voto imperial y creando La Asamblea, un territorio propio para los Halflings, formado a partir de las tierras más fértiles que expropió de Stirland y Averland.
Aunque los Halflings tienen un enfoque desenfadado de la vida, a menudo esto se debe a que deben ceder ante las culturas dominantes que les rodean. Los visitantes descubrirán que, de vez en cuando, los Halflings tienen un toque de pompa y circunstancia, y pueden tomarse las cosas casi en serio, y esto ocurre sobre todo en la Asamblea.
Por ejemplo, a diferencia de la mayoría de los Condes Electores, el representante de la Asamblea debe ser elegido por el gran consejo de ancianos. La elección se celebra cada tres años en Eicheschatten. El Consejo casi siempre elige al Halfling nominado por el elector saliente porque el Elector se esfuerza por elegir a alguien que el Consejo apruebe. Por ello, es vital que los candidatos que deseen ser elegidos recorran el condado ganándose el favor de los ancianos del pueblo y de la gente a la que representan. Esto es lo que se conoce como los ‘trapicheos’.
La elección del Anciano de la Asamblea carece de la fastuosa ceremonia que prefieren las especies más altas, pero es fundamental para la política de los asamblearios. Se trata con su propio tipo de formalidad y respeto. Es más probable que las familias se reúnan para hacer un picnic que los soldados desfilen por las calles, pero así es como los Halflings muestran su respeto: reuniéndose para comer. La sociedad asamblearia funciona porque cada Halfling se ve a sí mismo como parte de ella, y tiene interés en protegerla. De hecho, los visitantes pueden encontrar las ciudades cerradas si se está celebrando un consejo.
No es que los días del consejo sean tranquilos, ni tampoco los ‘días sagrados’ de los Halflings. Incluso los más altos tribunales de la Asamblea son asuntos ruidosos y subidos de tono, con frecuentes bromas, llamamientos a la audiencia y "participación" del público (constantes interrupciones). A Hisme, la actual Anciana de la Asamblea, le encanta empezar los asuntos oficiales con una gran pedorreta para llamar la atención de todos. Se dice que el Gran Consejo más largo de la historia se retrasó por los persistentes estallidos de cantos populares, completados con ensordecedores ruidos de sobaco del famoso anciano Obvaluta Crumleywort.
Conflicto Canon[]
- En el libro de Ejército de El Imperio de la 7ª Edición establece que los Haflings ganaron su voto en el año 1000, la contrario que en el 1010 como establece la mayoría de las fuentes.
Fuentes[]
- Warhammer Fantasy JdR 2ª Edición, pág. 16.
- Warhammer Fantasy JdR: Herederos de Sigmar (2ª Ed. Rol), págs. 10, 15, 60.
- Warhammer Fantasy JdR: Archivos del Imperio: Volumen 1 (4ª Ed. Rol), págs. 34, 36.
- Ejércitos Warhammer: El Imperio (7ª Edición), pág. 56.
- Ejércitos Warhammer: El Imperio (7ª Edición), pág. 30.