
Amanar en Total War: Warhammer II
En las profundidades cenagosas bajo la Puerta Esmeralda de Lothern dormita Amanar, el protector inmemorial de la ciudad.
Descripción[]
El Merwyrm solo despierta y emerge para devorar a quienes amenazan con destruir Lothern en los momentos de más necesidad. En los archivos de la Torre Resplandeciente solo constan tres apariciones de Amanar.

La primera fue durante la invasión de los Demonios, cuando engulló a toda una legión que sitiaba la ciudad. La segunda fue en la Secesión, cuando alzó Lothern sobre su lomo para protegerla de las grandes olas que anegaron Ulthuan. La tercera aparición de Amanar, y última hasta la fecha, se produjo durante la Gran Incursión. Con un golpe de su cola, dispersó a gran parte del ejército de los Elfos Oscuros, y a continuación, ignorando los pinchazos de sus cuchillas, se volvió y arrastró bajo las aguas al Arca Negra "Gozo Intolerable". No se ha vuelto a ver a Amanar desde aquel día, pero pudo recuperarse una única y gigantesca escama que ahora forma del corazón irrompible de un poderoso escudo mágico.
Curiosidades[]
- En el videojuego Total War: Warhammer II, el objetivo final de la campaña de las facciones de "la Costa del Vampiro" es matar y resucitar a Amanar como un monstruoso no muerto al servicio de su amo, para de esta forma poder controlar los mares.
- En ediciones anteriores, Amanar es descrito como una Serpiente Marina gigantesca, pero en el libro de ejército de la octava edición consta como un Merwyrm. Este cambio no se produce en la versión española.