En vida, Adolphus Zwemmer era el líder de los Bandidos de Sangre Azul y un poderoso Paladín del Caos al servicio de Nurgle, el inmundo Señor de la Pestilencia. Aunque cayó en batalla ante el Duque de Parravon, el cuerpo de Zwemmer desapareció misteriosamente y fue enterado en secreto en un túmulo cerca de la montaña Frugelhorn, hasta el día en que Kemmler tropezó con ese túmulo...
Zwemmer todavía leva la armadura del Caos, aunque el casco y la greba izquierda le faltan. Al margen de los símbolos de Nurgle con los que su armadura está adornada y sus patas de cabra, Zwemmer se parece mucho al resto de los esqueletos.
Seguidores[]
Bettino Taglielli[]
Taglielli fue uno de los mejores lugartenientes de la banda de forajidos de Zwemmer. Herido de muerte poco después de la muerte de Zwemmer, fue enterrado cerca de su antiguo amo.No se diferencia mucho de los esqueletos a los que dirige.
Didier Cousteau[]
Cousteau era un bretoniano, reclutado enseguida de una banda de forajidos competidores a la que traicionó y que acabó en un baño de sangre a manos de Zwemmer; murió de una parálisis poco después del fallecimiento de Zwemmer. No se diferencia mucho de los esqueletos a los que dirige.
Guerreros Esqueleto[]
Éstos son los restos reanimados de los antiguos Bandidos de Sangre Azul, muchos de los cuales murieron junto a Zwemmer y fueron enterrados alrededor de su tumba de tierra. Posteriormente se vieron reforzados por los muertos de la Mina de Gimbrin, de las Granjas de los Wernicke y los Kassenbrinck y por los muertos de Frugelhofen.
Fuente []
- Warhammer Fantasy JdR: El Señor de los Nigromantes (1ª Ed. Rol), págs. 86 y 87.