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Orden de caballería Imperio por Adrian Smith

Los nobles del Imperio no forman parte de ningún ejército estatal regular, ya que algo así significaría tener que codearse con la soldadesca común. En cambio, suelen luchar formando parte de una de las muchas Órdenes de Caballería del Imperio, heroicas hermandades de guerreros que cabalgan a la batalla a lomos de potentes Caballos de guerra protegidos por espectaculares bardas.

Los caballeros son figuras magnificentes que llevan brillantes armaduras y empuñan armas de la mejor calidad. La visión de un regimiento de caballeros cargando a toda velocidad es aterradora para los enemigos del Imperio. Las atronadoras cargas de los caballeros son una visión aterradora, se asemejan a una brutal avalancha de acero y músculo, y sus enemigos, incrédulos, suelen morir ensartados en el afilado extremo de sus Lanzas de Caballería, y aquellos que no acaben de esta manera probablemente resultarán aplastados por los herrados cascos de sus Caballos de guerra.

Descripción[]

Maniobra Precipitada por Travis Kotzebue Caballeros Imperio

Las Órdenes de Caballería del Imperio son hermandades de heroicos guerreros que van a la batalla a lomos de potentes caballos con barda. Se tratan de figuras magnificentes vestidas con una armadura brillante manufacturada por herreros Enanos y equipadas con las mejores armas que hay a disposición de las tropas del Imperio y montan maravillosos corceles.

Son muchos los hijos de nobles que deciden enrolarse en las filas de alguna de las selectas hermandades de las Órdenes de Caballería, situadas a lo largo y ancho del Imperio. Para convertirse en miembro de una de las Órdenes, un noble debe renunciar a sus responsabilidades feudales y a sus derechos hereditarios, y a continuación superar un riguroso rito de iniciación.

Cada Orden de Caballería se organiza de acuerdo con una estricta jerarquía interna. Cada novicio se entrena en la virtud marcial y el código de caballería hasta que demuestra estar preparado para tomar el manto del caballero, aunque la mayoría están regidas por los Caballeros del Circulo Interior. Mientras el guerrero se atenga a su honor en el campo de batalla y pruebe ser digno de ello ascenderá en los rangos de su Orden y se forjará un nombre. Solo los caballeros más veteranos, los mejores guerreros del Imperio, conforman el Círculo Interior de la orden. Esos heroicos combatientes, cada uno de los cuales vale por varios soldados regulares, representan el epitome de las virtudes de su Orden de Caballería, han conseguido grandes hazañas matando a sus enemigos en incontables batallas y se han distinguido por su valor, con lo que han ganado el derecho de ascender hasta esta importante posición. Los Caballeros del Círculo Interior son la élite de la élite, se cuentan entre los mejores combatientes del Imperio, y solo van a la batalla para combatir contra los enemigos más peligrosos y diabólicos.

Portada Libro de Ejército El Imperio sexta por Dave Gallagher Órdenes de Caballería

Por encima incluso de los caballeros del Círculo Interior se encuentra el Gran Maestre. Los caballeros deben obediencia eterna a su señor, el Gran Maestre de su Orden, ya que se trata de un guerrero y un líder de un valor sin igual, que ha participado en decenas de batallas y cuya capacidad militar esta más allá de toda duda. Los Condes Electores a menudo piden a los caballeros de una Orden que tomen las armas y se unan a su ejército. La inclusión de esta caballería pesada en su ejército es vital para los Condes. Por este motivo los Grandes Maestres son tan poderosos, pues de ellos depende la decisión final de unirse al ejército del Conde o no. A menudo, la condición impuesta para prestarles ayuda es que el propio Gran Maestre asuma el mando del ejército; condición que la mayoría de Condes Electores aceptan de buen grado, ya que los Grandes Maestres son líderes formidables.

Muchas Órdenes deben lealtad directamente al Conde Elector de su provincia. El Conde puede llamar a sus caballeros para luchar en su ejército. Cuando un Conde reúne sus fuerzas, todos los caballeros de una misma orden luchan juntos, formando unidades individuales de Caballeros Pantera, Caballeros del Sol Llameante, etcétera. La historia del Imperio está plagada de disputas internas, y a veces, un Conde ha combatido con su ejército contra el de otro, y caballeros de diferentes provincias han combatido entre ellos, a pesar de pertenecer a la misma Orden. Esto es aceptado como parte del orden natural de las cosas, y no es causa de rencor entre las Ordenes de Caballería.

Todos los caballeros del Imperio portan en sus escudos o armaduras los símbolos de su rango y de su Orden, al igual que sus escudos heráldicos y otros iconos de importancia o que tengan un especial significado simbólico, mientras el estilo de su armadura y de sus ropajes se basa en un diseño tradicional. Las Órdenes de Caballería más famosas del Imperio pueden trazar su historia varios cientos de años hacia atrás, y sus fortalezas suelen rebosar de antiguos estandartes y trofeos de batalla, algunos de ellos originarios en el nacimiento del Imperio, cuando los primeros integrantes de la orden lucharon junto a Sigmar.

Hermandades Selectas[]

¡Cargad! por Adrian Smith Caballería Imperio Dragón del Caos

Aunque los caballeros varían mucho, tienen varias características en común. La mayoría lucha con armadura completa, tanto a pie como a caballo. La mayoría están afiliados a una Orden de Caballería, agrupaciones de caballeros unidos por un propósito común. Podría tratarse de una vocación religiosa, ya que muchos caballeros son templarios al servicio de un culto, especialmente los de los dioses como Sigmar, Ulric o Myrmidia. Hay órdenes seculares que pueden estar afiliadas a una provincia o ciudad concreta, mientras que otras, como los Caballeros Pantera, tienen influencia política en muchas provincias y ciudades. Las órdenes son numerosas y varían mucho, cada una con sus propias aspiraciones, peculiaridades y virtudes caballerescas.

No todos los caballeros pertenecen a una orden. Hay excéntricos caballeros de fortuna que cabalgan por la tierra, sin amo ni mercenarios, movidos por su propio código de virtud o amor a la moneda. La llegada de un caballero de este tipo a una ciudad o pueblo puede ser una buena ocasión o un motivo de grave preocupación.

Historia[]

Los precursores de los caballeros eran guerreros que luchaban en el séquito de poderosos jefes y sacerdotes en los primeros siglos del Imperio. Cuando una tribu saqueaba o ganaba suficiente riqueza para obsequiar a la comitiva del señor con caballos y armadura, adoptaron un papel de caballería de choque en el campo de batalla. Por ejemplo, se cree que los Osterknacht tienen su origen en la guardia personal de hacheros del rey Adelhard, de la tribu Ostagodos.

Otras bandas de caballeros guarnecían originalmente la frontera, con fuertes construidos para asegurar las tierras de su señor. Estaban armados y blindados para mantener a raya a los lugareños y el territorio despejado de amenazas. Por ejemplo, la Orden de la Montaña de Plata comenzó como una banda de matones montados, encargados de mantener tierras acaparadas por un olvidado barón de Hochland.

Las fundaciones de muchas órdenes fueron religiosas, donde los guerreros, monjes o guardias de los templos evolucionaron hasta convertirse en regimientos de combate financiados por los fieles. A lo largo de los siglos, crecieron en poder dentro de la jerarquía del culto y de la sociedad del Imperio en general. Los Caballeros del Lobo Blanco, la Orden del Corazón Ardiente y los Caballeros del Cuervo se formaron de esta manera.

Se fundaron innumerables órdenes durante las cruzadas, cuando los caballeros del Imperio y Bretonia acudieron a luchar en Estalia y más tarde en Arabia. Surgieron hermandades de caballeros creadas durante la campaña y regresaron al Imperio para establecer nuevas órdenes. Los ejemplos más célebres son los Caballeros Pantera, la Orden del León Dorado y los Caballeros del Sol Llameante, que nacieron de estos conflictos de mayor alcance.

Las órdenes[]

La mayoría de los caballeros proceden de la nobleza. De hecho, las más altas órdenes generalmente consideran la caballería su única tradición guerrera. Muchas familias nobles tienen afiliaciones con órdenes específicas, pero algunos hijos e hijas rompen con la tradición para unirse a una orden más acorde con su creencias o temperamento.

Las órdenes de caballería varían mucho en tamaño y poder, aunque suelen compartir una estructura similar. El Gran Maestre supervisa un Círculo Interior de caballeros veteranos o favorecidos que lo dirigen. Por debajo de ellos están los Primeros Caballeros o Preceptores que mandan sus propias unidades y son atendidos por los escuderos que aspiran a ser caballeros.

La mayor parte de las variaciones se deben a la cultura y las costumbres. Órdenes como los Caballeros de la Sangre de Sigmar están fuertemente estructurados en una organización monástica, donde la vida está regida por la jerarquía. Otros tienen una cadena de mando menos rígida. El caballero es libre de vivir como quiera, con una única obligación de respetar los valores de la Orden, salvaguardar su reputación y acudir cuando el Gran Maestre llama a la batalla.

La mayoría de los caballeros tienen una renta privada de la tierra y propiedades, que utilizan para pagar su equipo y criados. Otros se benefician del mecenazgo nobiliario o, en el caso de los templarios, las arcas del culto.

Los caballeros en sociedad[]

Los caballeros desempeñan varias funciones de prestigio en la sociedad. Evidentemente, sirven al ejército como caballería pesada, pero también actúan como guardias de personalidades y edificios importantes como templos y palacios. A menudo se les encuentra en el papel de agente o consejero militar de los nobles o los comerciantes más ricos.

Individualmente, los caballeros se benefician de la política de su Orden, el poder o el estatus asociado a su título. Son libres para caminar entre las órdenes superiores y los militares por igual. Algunos se aprovechan, abusando de su posición y privilegio para dominar a los demás.

Los caballeros también distraen a las masas con torneos y desfiles en los pueblos y ciudades del Imperio, entreteniendo a la gente común que disfruta del espectáculo de un regimiento en marcha, con sus estandartes ondeando al viento.

Cómo convertirse en Caballero[]

Las órdenes más eminentes limitan su número a los nobles que hayan sido recomendados por uno de los Círculos Interiores, pero hay excepciones. En algunas Órdenes, el peticionario debe servir en un regimiento de Cuerpo de Herreruelos antes de que sea considerado apto para ser admitido. Las órdenes templarias aceptan iniciados, sacerdotes, monjes y monjas. Estos aún deben probarse a sí mismos como novicios, aprendiendo humildad y confirmando su fe.

Una vez aceptado, el candidato sirve como escudero y finalmente se somete a alguna prueba o competición para determinar su valía. Si aprueban, son nombrados caballeros por el Gran Maestre o algún otro patrón de la Orden, como por ejemplo un Sumo Sacerdote, un Conde Elector o el propio Emperador. La Orden concede al nuevo caballero un símbolo de su nuevo estatus, como un anillo heráldico, un medallón o un sello.

Caballeros como aventureros[]

Un caballero de fortuna vive una vida muy parecida a la del resto de un grupo de aventureros. La mayoría de las veces, los caballeros no están cargando a través de un fangoso campo de batalla. Mientras que algunos están acuartelados permanentemente en un destino, se espera que muchos más se aventuren en el mundo para ampliar sus conocimientos, buscar con inteligencia, perfeccionar sus habilidades y emprender las misiones que se les asignen. Actúan como mensajeros o diplomáticos, representando a su Orden ante personas poderosas o importantes a lo largo del mundo y más allá.

Pocos caballeros viajan solos. Se espera que se rodeen de personas que hagan el trabajo que ellos no pueden hacer, no deben, o no quieren.

Accesorios de un caballero[]

Las posesiones de un caballero son afirmaciones de su estatus e identidad. La mayoría de las Órdenes esperan que sus caballeros mantengan un nivel de apariencia acorde con su reputación. Esto no solo implica armas y armaduras de buena calidad y bien mantenidas, sino también un tabardo inmaculado, arreos de montar y los adornos de la vida cotidiana adecuados a su posición en la sociedad. Los caballeros serán invitados a la corte, por lo que deben tener ropa de calidad y un atuendo ceremonial.

Si un caballero alcanza la elevada posición de Primer Caballero del Círculo Interior, se espera que tenga su propia unidad. Estos caballeros subordinados son asignados por la Orden y puede guiarlos en la batalla.

Monturas[]

Caballos[]

A medida que se avanza en la carrera como caballero, se podrá adquirir primero un caballo de monta y luego un destrero, un poderoso caballo de guerra que es letal por derecho propio. Cuidar de una bestia tan magnífica no es tarea fácil. En campaña o por los caminos, tendrá que conseguir estabulación y acicalar al caballo, ya sea él mismo o contratando a otra persona.

Semigrifos[]

En algunas Órdenes de Caballería existen caballeros del Círculo Interior lo suficientemente valientes como para montar semigrifos en la batalla. Deben demostrar su valía aventurándose en el bosque y capturando a una de esas bestias aterradoras ellos mismos. Incluso un semigrifo entrenado es una bestia temperamental y salvaje. En batalla, golpean rápidamente con sus garras y picos, mientras que su jinete embiste al enemigo con una alabarda de caballería.

La mayoría de Órdenes de Caballería desaconsejan viajar con un semigrifo, ya que tan preciosas bestias son difíciles de mantener. Si abandonan lo establos de la Orden, se necesita encontrar grandes establos seguros o una cuerda gruesa y un robusto árbol, pues son animales resistentes que pueden dormir a la intemperie.

Otras monturas[]

Hay leyendas de caballeros que cabalgan bestias aún más inusuales, incluidos lobos gigantes de invierno, atronadores toros de batalla, dragones o criaturas exóticas de Lustria. Puede haber incluso algo de verdad en estas historias. Los grandes maestres pueden ir sobre monturas aún más impresionantes cuando comandan un ejército. Algunas Órdenes pueden permitirse proporcionar a sus líderes un grifo o pegaso entrenado, dándoles el beneficio del vuelo para planear sobre el campo de batalla y abalanzarse donde su liderazgo es más necesario.

Lista de Órdenes Conocidas[]

Carga de la caballería Imperial

El siguiente listado contiene las Órdenes que se conocen en el Imperio. Algunas son muy conocidas en todo el mundo, mientras que otras son pequeñas logias que hacen todo lo posible por tomar parte en lac defensa del Imperio. Las cuatro Órdenes de Caballería más grandes e influyentes son la Reiksguard, los Caballeros del Lobo Blanco, los Caballeros Pantera y los Caballeros del Sol Llameante, aunque también existen muchas otras de gran renombre.

A-B[]

  • Acero Brillante - Estos caballeros se enorgullecen de su inmaculada presentación y disciplina. Son rivales de los Caballeros del Lobo Blanco, a los que consideran indecorosos.

C[]

  • Caballeros Carmesí - Elegante y adinerada, la Orden solo recluta a privilegiados. Luchan con una armadura roja y dos espadas, renunciando al escudo como ‘una defensa para plebeyos’.
  • Caballeros del Corazón Ardiente.
  • Caballeros del Cuervo.
  • Caballeros del Ciervo.
  • Orden de Caballeros de Manann.
  • Cazadores de Sigmar.
  • Cruz del Norte - Juran rechazar las comodidades de la civilización. En su logia en lo alto de las Montañas Centrales del norte llevan una vida austera, luchando contra los hombres bestia y los pieles verdes de las tierras altas.

D[]

E[]

  • Caballeros Encarnados.
  • Orden del Escudo Rojo - Esta Orden de caballeros es la guardia personal del conde elector de Talabheim. Junto con el conde Halmut Feuerbach, llevan desaparecidos desde la Tormenta del Caos.
  • Orden de la Espada Rota.
  • Orden de la Espada y la Balanza.
  • Orden de la Espada Dorada - Esta orden partió en el 1519 junto la Lanza de Cristal y Caballeros del Sol Llameante, de Solland, Ostland y Talabecland en una gran cruzada contra Arabia. Regresaron al Imperio un año después durante la invasión de Gorthor el Cruel, antes de que los hombres bestia consiguieran la victoria.
  • Caballeros de la Estrella del Norte - Protectores de Nordland y campeones del Emperador.
  • Espada Brillante - Fundada por un caballero proscrito que recuperó el Colmillo Rúnico de Solland después de que estuviera perdido durante siglos, sus miembros afirman ser descendientes de la caída Orden de la Espada del Sur, campeones de Solland desde los tiempos de Sigmar.
  • Espuelas Sangrientas - Jinetes consumados, la carga de los Espuelas Sangrientas es temida por sus enemigos. Quedaron mermados, pero salieron victoriosos en la batalla de Nuln contra las hordas de Tamurkhan en el 2511 CI.
  • Estrella del Norte - Estos protectores de Nordland y paladines del Emperador tienen su sede en Salzenmund. Vestidos de azul medianoche y negro, son sospechosos de dividir sus lealtades entre Nordland y Altdorf.

F[]

G[]

H[]

J[]

L[]

M[]

O[]

P[]

  • Caballeros Pantera.
  • Caballeros del Pergamino.
  • Puño Sangriento - Formada por caballeros ulricanos fuera del control del culto, el Puño Sangriento tiene su base en Ostland, donde se enfrentan a la hostilidad de la población mayoritariamente sigmarita. Son luchadores brutales y a menudo se alían con mercenarios ogros.

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Imágenes[]

Fuentes[]

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