El Ídolo de Jade de Nuln es una hermosa estatuilla que representa una figura andrógina erguida que se cubre el pecho con un brazo y el pubis con el otro. Es una obra de arte exquisita hecha de jade pulido. Pero en este ídolo hay algo más, algo mucho más perverso de lo que sugiere su aspecto.
Descripción[]
Se cree que el ídolo de Jade procede de la lejana Catai; apareció por primera vez en el Imperio en el mercado de Averheim entre otras curiosidades variadas, algunas meramente decorativas, otras supuestamente mágicas. A Tuergis el Gordo, un inmundo burgués famoso por su obsesión por los jovencitos, la estatuilla le resultó atractiva y extrañamente seductora, por lo que la adquirió. La colocó sobre su manto, y se convirtió en el centro de todas las conversaciones en sus sórdidas fiestas. Cada vez se sentía más atraído por su inusual forma, pasaba sus manos por la suave piedra, y al hacerlo afloraban a su mente imágenes siniestras. Con el tiempo, cambiaron sus gustos en materia de amantes, pasando gradualmente de la decadencia a la perversión. Por suerte para Tuergis, fue lo bastante prudente como para vender el objeto antes de quedar esclavizado por él.
El ídolo de Jade pasó de propietario en propietario hasta acabar en Nuln, en la colección personal del conde Romanov. Al igual que Tuergis antes que él, el conde se sintió fascinado por la estatuilla, pero en lugar de rechazar sus malignos impulsos, los aceptó plenamente. Colocó la estatuilla en un cuenco de sangre, complacido por los extraños aromas que emanaban de ella. Los inspiró profundamente, y los vapores llenaron su mente con repugnantes imágenes de placeres físicos. Antes de que Romanov pudiera llegar a desentrañar sus secretos, fue víctima de su avaricia y murió. Su hogar se quemó, y todo lo que contenía fue destruido. Aunque el Ídolo de Jade se considera destruido, la verdad es que aún sigue existiendo, pero nadie conoce su paradero ni su propietario actual.
El ídolo de Jade es un instrumento de Slaanesh. Produce una sensación placentera al ser manipulado, estimulando los sentidos y evocando extraños deseos. También puede ser utilizada como ingrediente adicional en rituales, aumentado su efecto si se ubica dentro de un cuenco de sangre. También desestabiliza en gran medida toda magia que actúe a su alrededor, llegando hasta los doce metros, influenciando en todos los hechizos como si hubieran manipulado el Dhar.